Rebeca, la enfermera canaria que se ha plantado en Madrid para ayudar en un hospital contra el coronavirus

Rebeca Amador es una enfermera tinerfeña que desde este lunes trabaja en la UVI del Hospital La Paz de Madrid. Días atrás recibió el aviso de que necesitaban personal sanitario para ayudar en la crisis del coronavirus y no se lo pensó dos veces.

El pasado viernes publicaba un tuit en busca de una habitación donde poder hospedarse. Su mensaje fue retuiteado por miles de personas y consiguió su objetivo. Se aloja en un piso de la Federación Española de Hemofilia, muy cerca de La Paz y del Hospital Ramón y Cajal, aunque ha recibido numerosos ofrecimientos, también de transporte.

Rebeca ha trabajado recientemente en el Área de Salud Mental del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, aunque actualmente estaba en desempleo. Su especialidad en Urgencias, Emergencias y Críticos le hace estar preparada para trabajar a destajo en la UVI de La Paz: "Estoy preparada para el colapso hospitalario y sí es verdad que voy con un poco de miedo porque nadie se esperaba esta situación, pero habrá que ser un poco MacGyver", comentaba resignada en los micrófonos de COPE Canarias.

Su viaje a Madrid este fin de semana, reconoce, le ha dejado soprendida. "El avión iba lleno, salvo con el asiento del medio vacío; vi de todo: mascarillas hechas con toallitas de bebé, de albañiles... o guantes para coger la fruta en los supermercados e, incluso, de carnaval".

A Rebeca le esperan por delantes unas semanas muy duras ante las que asegura estar preparada y hacerlo con lo mejor de sí misma para poner su granito de arena a frenar la curva del coronavirus.