La historia de Marta y su hijo con autismo: "Cuando termine el curso, nos vemos en la calle otra vez"

Asfixiados por los altos precios y los requisitos del mercado inmobiliario, por ahora se quedan en una vivienda de alquiler vacacional. Tienen que abandonarla el próximo mes

Lucia Hernández Peraza

Tenerife - Publicado el

3 min lectura

Muchos canarios están teniendo problemas para acceder a una vivienda: los altos precios y los requisitos, cada vez más exigentes, hacen que encontrar un piso sea una misión imposible. Marta es víctima de esta crisis habitacional, aunque su caso es aún más preocupante. Trabaja en hoteles en el sur de Tenerife y tiene un hijo diagnosticado con autismo. Si en los próximos dos meses no se hace con un alquiler asequible, tendrán que dormir en un coche. 

requisitos imposibles

La protagonista de esta historia ha contado su historia a los micrófonos de Herrera en COPE Tenerife. En el 2018 vivía en el sur de Tenerife pagando unos 450 euros de alquiler. "Cuando salgo de este piso me encuentro con una realidad, pero de película de miedo. Es imposible acceder a una vivienda hoy por hoy por los requisitos que piden". Explica que en una de sus últimas búsquedas, encontró un apartamento de una habitación en El Tanque: "Me piden una nómina de 1.950 euros porque dicen que la Ley de Vivienda exige que tiene que ser un 30% del sueldo. ¿Quién cobra 1.950 euros en un trabajo normal?".

Portal Idealista

Alquileres en Playa de Las Américas, Tenerife

A esto se le suma la situación de vulnerabilidad de su familia, pues es madre soltera de un hijo con un diagnóstico de autismo. Marta asegura que este hecho hace que muchos propietarios les cierren las puertas: "Ya no quieren madres solteras con hijos porque no les interesa que entre un menor, por si me puedo agarrar a eso y no pago porque la Ley me ampara". 

Ya no quieren madres solteras con hijos porque no les interesa que entre un menor"

Sus mascotas también son indispensables en su unidad familiar, pues sus dos gatos y un perro suponen un apoyo emocional para su hijo: "Son sus amigos, son su terapia". El problema está en que muchos propietarios se niegan a que sus inquilinos tengan animales, lo que hace que se reduzcan las opciones de alquiler. "Los asistentes sociales me invitan a que abandone a los animales, cosa que yo no puedo hacer. Mi hijo me dice que prefiere morirse antes que dejar a los bichos". 

fomento de la delincuencia

Marta cree que la situación está tan complicada que entiende que se está fomentando la delincuencia. "Lo que me invitan es a que le dé una patada a una puerta, cosa que yo no puedo hacer. Tengo un hijo autista y bueno, le puede dar algo". Asegura que muchas personas de su entorno le instan a que lo haga, ante la falta de opciones. "¿Por qué tengo que hacer yo eso en mi tierra? Es que no entiendo por qué tengo que delinquir y meterme en una casa con un hijo, cuando a él estas cosas le perjudican muchísimo". 

Lo que me invitan es a que le de una patada a una puerta, cosa que yo no puedo hacer"

También ha sido víctima de estafas. Le han pedido una señal para un piso que después no existía. "Ya son 1.150 euros que me estafaron". Ha denunciado el caso a la Justicia, pero no cuenta con una solución a corto plazo por la lentitud de los procesos judiciales. 

volver a la calle

Archivo COPE

Granadilla de Abona

Marta no es la primera vez que se enfrenta a la dura realidad de quedarse sin lugar donde pasar la noche. Durante un tiempo tuvo que vivir junto a su hijo en una tienda de campaña en La Tejita, en Granadilla de Abona. "Para él es toda una aventura y ha sido un valiente, pero yo me he visto de despertar a las 5 de la mañana y verme a un tipo con unas pintas rondando la caseta".

Ahora se está quedando en una vivienda de alquiler vacacional. Paga unos 700 euros y lo considera un milagro: cuando llegue la temporada alta, explica que subirán a 400 o 500 euros por semana, unos precios que no puede asumir. "Por lo menos aquí estamos hasta que mi hijo termine el curso, donde puede tener una ducha para ir al colegio, comer caliente y descansar en condiciones. Cuando ya termine el curso, nos vemos en la calle otra vez".