El Gobierno de Canarias declaraba este lunes la situación de prealerta por calima en el archipiélago, la tercera en lo que llevamos de año. Una situación que preocupa por las partículas nocivas que arrastra el polvo en suspensión desde la costa africana hacia nuestras islas.

La previsión era que se superaran concentraciones de polvo del desierto de 50 microgramos por metro cúbico, pero la realidad es que en algunas islas de archipiélago como Fuerteventura, Lanzarote y Tenerife ha sido muy superior a lo esperado. La calima está afectando sobre todo a la costa y medianías de las islas, lo que puede generar o agravar los problemas de salud a personas con enfermedades crónicas y/o respiratorias.

En Herrera en COPE Canarias hemos hablado sobre los efectos que puede generar la calima en nuestra salud con Nancy Ortega, responsable del servicio de alergología del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín.

La especialista ha expuesto que ante estos episodios de calima en las islas estamos respirando contaminantes adheridas a ese polvo en suspensión que viene arrastrada de las costas de África. “Son partículas que pueden producirse en este litoral vecino y que salen muchas veces de las fábricas. Por eso nos trae metales: óxido, el sílice… y también partículas de hongos o bacterias. Todo esto afecta al árbol respiratorio (nariz, bronquios y pulmones); y sobre todo a los ojos, que los irrita”, añade.

La alergóloga relata en nuestros micrófonos que si la calima nos produce irritación en los ojos o en las vías respiratorias, “lo conveniente es no salir a la calle y resguardarse lo máximo posible”.

Mala calidad de aire en Canarias por la calima: Más de 50 microgramos por metro cúbico

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda no exponerse a más de 50 microgramos por metro cúbico, cantidad que estos días se supera con creces en algunas islas del archipiélago canario.

Según expone la especialista, las partículas, al tener un diámetro tan pequeño, pasan directamente a las vías respiratorias e irritan los ojos, por lo que una exposición prolongada podría tener efectos nocivos en nuestra salud.

Según Nancy Ortega, "ese irritante, nos va a producir unas molestias y en ocasiones es conveniente no salir a la calle. De hecho, la OMS dice que más de 50 partículas por metro cúbico no deberíamos estar respirándolo y ayer, por ejemplo, estuve mirando las partículas que había y estábamos alrededor de 200 o 300 en algunas islas, sobre todo, en Fuerteventura y Tenerife”.

Las partículas contaminantes afectan a nuestra salud, por todo lo que nos trae la calima de la costa africana, y por eso se recomienda que cuando los datos sean muy superiores a lo establecido por la OMS tomemos más precauciones. “La OMS dice que con más de 50 microgramos por metro cúbico tenemos que ir a la calle con mascarilla y protegernos los ojos, con gafas de vista o de sol, para no dañarlos”.

Dice que “esto puede producir molestias de rinitis, nariz seca, el agüilla, la sensación de falta de aire, síntomas conjuntivales: lagrimeo, dolor de ojos, etc., muchas veces todo esto nos incomoda para salir a calle y llevar una vida normal”.

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“Es peligroso salir fuera de casa con todas estas partículas y hay que tomar precauciones porque ya comienza a afectar a la salud. Además, hay que añadir otra situación y es que aquí, por tener una temperatura estable, que no varía tanto como en otros lugares de la Península Ibérica, tenemos una incidencia muy alta de ácaros en el ambiente. Es el paraíso para ellos por la climatología que tenemos de temperatura estable”, insiste.

Nuestro clima, el paraíso para los ácaros

La responsable del servicio de alergología del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, asegura que no solo tenemos el problema de esas partículas contaminantes que viajan desde la costa de África, sino que también nuestro clima, es perfecto para la reproducción de los ácaros, lo que es un problema más añadido para las personas con alergias.

“Para el turismo somos el paraíso por nuestro clima y es el motor de la economía; pero para nuestra salud incide mucho porque los ácaros necesitan una temperatura ambiental de 18 a 20 grados y consiguen reproducirse con mayor facilidad. De hecho, aquí no hay nada que los mate, y por eso debemos hacer una limpieza exhaustiva en nuestros hogares para tratar de erradicarlos. Para ello, utilizaremos paños húmedo para evitar que los ácaros pasen al ambiente y eso nos siga repercutiendo en la salud”.

Nancy Ortega, como resumen, expone que hay que resguardarnos en nuestros hogares cuando tengamos estos episodios de calima y sobre todo, cuando lleguemos a niveles altos de partículas contaminantes para nuestra salud.

Entre las recomendaciones a seguir: mantener puertas y ventanas cerradas, así como evitar salir a la calle si se padece alguna enfermedad respiratoria crónica. También recomiendan beber mucho líquido y evitar los ambientes secos, así como no hacer ejercicio físico severo mientras dure la situación.