La isla de Lanzarote afronta la peor de las situaciones a las que se ha enfrentado desde que comenzó la pandemia. Actualmente según los indicadores epidemiológicos que maneja el Gobierno de Canarias, presenta las cifras de incidencia más altas con 380,85 y 680,29 casos a 7 y 14 dias por cada 100.000 habitantes. Unos datos desproporcionados en comparación con los que presentan el resto de islas.

No cabe duda de que la incidencia de la tercera ola va al alza en Lanzarote. En los siete municipios de la isla las cifras apabullan, especialmente en Arrecife, que cuenta con los datos más altos de toda Canarias. En este caso hablamos de una incidencia de 523 y 889 casos. No hay ninguna institución que presente estos datos en el archipélago.

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Haría es el municipio en mejor situación, entre comillas, su indicador a 14 días está un paso por detras del resto de municipios al tener 214 casos a 14 días, aunque en el indicador de los últimos siete días, está ya en nivel de riesgo muy alto.

No ayuda precisamente a mejorar estas cifras la cantidad de incumplimientos que se han conocido por parte de muchos ciudadanos, que parecen obviar la gravedad de la situación organizando fiestas ilegales, en las que no se respetan las medidas de seguridad. La última de la que se ha tenido conocimiento, reunió a 70 turistas, en una terraza del municipio de Tías.

Los brotes esta semana se han disparado y se han localizado 51, entre ellos los que presentan un mayor número de personas relacionadas en toda Canarias, con 32 y 28, vinculados al ámbito familiar. En las últimas fechas también se ha incrementado el número de muertes. Desde el arranque de la pandemia, han fallecido 11 personas. Ahora mismo hay 30 pacientes hospitalizados y en la UCI otras 8. Ante la gravedad de los acontecimientos, el consejero de Sanidad se desplaza este viernes a la isla y se especula con la posibilidad de que puedan adoptarse nuevas medidas para contener la pandemia. Entre ellas, adelantar el toque de queda.