Los Bomberos del SEPA se movilizan: "Estamos en precario para apagar los grandes incendios de Asturias"

Cada tres semanas se origina un incendio de grandes dimensiones en Asturias. Es lo que revelan las estadísticas que manejan los bomberos del Servicio de Emergencias del Principado (SEPA) que han iniciado movililzaciones para denunciar que "estamos en precario y necesitamos orden con los turnos".

Más de un centenar de trabajadores de los diecinueve parques de Bomberos que hay en el Principado se han concentrado este jueves frente a la nave de El Berrón que albergaba un negocio de jardinería y que fue arrasado por las llamas el pasado 18 de febrero perteneciente al Grupo Bollador. Denuncian que la falta de personal impidió movilizar aquel día todos los medios necesarios para actuar ante un gran incendio. "Debería haber llegado una primera dotación con ocho bomberos pero llegaron cuatro y dos camiones se quedaron en el Parque de la Morgal porque no había quién los trajese", asegura la bombera Nati Canto que ha actuado de portavoz de todo el colectivo.

El jefe de Bomberos, Miguel Ángel Pérez, ha querido salir al paso de las críticas de parte de la plantilla: "Hay unos compañeros en el Hospital que acababan de tener un accidente esa mañana y son del mismo parque que se movilizan en primer lugar. Evidentemente, desde el Hospital no podían movilizar esos vehículos". Y considera "graves" las acusaciones: "Es algo que me parece grave por parte de compañeros".

Canto ha denunciado que, aunque las dotaciones mínimas son de tres trabajadores, ese día llegaron a la nave de El Berrón cuatro bomberos gracias a un compañero que, casualmente, "pasaba por la zona en bicicleta y se puso a echar una mano", mientras otro de los bomberos se "jugó la vida" al entrar en el inmueble con una manguera para atacar el incendio y que no se desarrollase mientras llegaban dotaciones de otros parques.

Los trabajadores del SEPA aseguran que lo ocurrido en El Berrón no es una excepción sino "el día a día" debido al "galimatías que existe con los turnos, la falta de orden y las vacantes sin cubrir". Reclaman al Gobierno de Asturias que adopte medidas porque, de lo contrario, iniciarán encierros y una huelga indefinida que ya están tramitando.

El dueño de la nave arrasada por el fuego está convencido de que las llamas "eran controlables" cuando llegaron los bomberos pero "la falta de agua, el fallo de una escalera y de personal jugaron en contra". El portavoz de la compañía, Jorge Sanz, asegura que "hemos pedido el negocio por ahorrar en lo que se tiene que ahorrar".