Opel y Pikolin bajan la persiana en Aragón de manera temporal

El Estado de Alarma sigue desencadenando consecuencias a nivel económico y empresarian en Aragón. Desde este martes, la planta de Opel PSA en Figueruelas y la de Pikolin cesan su actividad temporalmente. La escasez de ventas, el hecho de no ser productos de primera necesidad, y la situación social que atraviesa el país ahora mismo han obligado a estas dos grandes empresas a adoptar esta medida que se suma a la que ya conocíamos ayer con CAF, que paulatinamente también fue mandando a sus empleados a casa y también bajó su persiana.

El Groupe PSA ha decidido cerrar sus fábricas en Europa como consecuencia de la aceleración constatada los últimos días de los casos graves de COVID-19 cercanos a algunas de las plantas de producción y de las rupturas de las cadenas de aprovisionamiento de proveedores importantes. Los miembros de la célula de crisis han decidido el cierre de los establecimientos de producción de vehículos hasta el día 27 de marzo. En concreto, en España el lunes cerraron las factorías de Madrid, este martes la de Zaragoza y el miércoles lo hará la de Vigo.

Además, los equipos de gestión de cada centro pondrán en marcha localmente los protocolos de cierre de las plantas que se llevarán a cabo en coordinación con los agentes sociales. El Grupo ha recordado que, en todos los casos, el respeto a las medidas de barrera, más allá incluso de las recomendadas por las autoridades sanitarias en las plantas, son la mejor protección para evitar la propagación del virus.

ERTE EN PIKOLIN

Por otra parte, Pikolin presentará un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) ante la paralización de las ventas que está suponiendo en cierre de las tiendas como precaución por el coronavirus. Además, la actividad de su centro productivo y logístico en Zaragoza ha cesado, temporalmente, este martes.

Fuentes de la empresa explicaron este lunes que se está empezando a preparar el ERTE, aunque a la espera de las medidas que anuncie este martes el Gobierno central. La empresa se ve obligada a cesar la actividad en sus centros de producción y logística puesto que los puntos de venta de colchones están cerrados y no pueden dar salida a sus productos.

En oficinas, el 50 por ciento de la plantilla ya se encontraba desde la semana pasada haciendo teletrabajo. En Pikolin trabajan un total de 870 personas en toda España.

APOYO A LAS EMPRESAS

Mientras tanto, las cámaras de comercio aragonesas han trasladado su apoyo a los profesionales y a las empresas poniendo a su disposición todos sus servicios habituales, ahora a través de teléfono y correo electrónico, en el marco de las medidas adoptadas por el Gobierno español. Tanto la Cámara de Zaragoza como las de Huesca y Teruel han adoptado ya idénticas medidas para poder atender a las empresas del territorio, a las que pueden seguir ejerciendo su labor y a las que han visto paralizada su actividad.

Así, se ha dispuesto en las tres instituciones un servicio mínimo presencial en horario de 9.00 a 14.00 horas únicamente para atender la realización de certificados. Con esa salvedad, las cámaras han establecido el sistema de teletrabajo para sus plantillas, de modo que los servicios a empresas queden garantizados a través de las vías telemáticas.

Las Cámaras de Comercio pretenden con esas medidas ser socialmente responsables al tiempo que velan por que la actividad económica no se paralice. En este contexto, ofrecerán servicios específicos de información a las empresas más afectadas acerca de los instrumentos que tienen a su disposición para paliar en lo posible los efectos de esta crisis, tanto los que la legislación ya tiene establecidos, como aquellos que pueda poner en marcha el Gobierno.

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