El residente de Cardiología del Hospital Universitario de Jaén José María Segura ha alcanzado el tercer puesto en la categoría “Capitán Optimista Dr. Antonio Cepillo” de los ‘Premios Hospital Optimista’, que organiza la fundación del mismo nombre y que distingue a nivel nacional a servicios y profesionales sanitarios que generan buen ambiente en su trabajo, tanto entre los compañeros como entre los pacientes. Segura desarrolla su labor como R3 de Cardiología en el Hospital Médico Quirúrgico. Los premios se entregaron en una gala celebrada en Valencia el pasado 27 de junio.

A pesar de su buen humor, José María Segura confiesa que tiene “sentido del ridículo”, pero admite que le gusta “divertir a los compañeros e intentar que los pacientes se sientan cómodos, en la medida de lo posible, generando un buen ambiente”. En este sentido y “aunque a mí me daba vergüenza, hubo compañeras que decidieron presentar mi candidatura y lo que tuve claro desde el momento en el que la vi publicada, que íbamos a por todo, a intentar ganar”, señala.

La votación cuenta con la implicación del personal de los centros que, en el caso del Hospital de Jaén, ha movilizado a los compañeros de José María en Cardiología, que ya contaban con la experiencia de la última edición, en la que el enfermero del servicio Francisco José Serrano obtuvo el segundo puesto.

José María Segura destaca que “la campeona, que se merece desde luego el premio, lleva 30 años de experiencia clínica, es enfermera en el Hospital de Valme, y si después de ese tiempo sigue con tantas ganas de dar lo mejor, es de admirar” y añade que “yo lo he tenido muy fácil porque el ambiente de la planta es estupendo, Paco (en referencia a Francisco José Serrano) es un referente en los cuidados y, por lo tanto, he contado con todos los factores para ser optimista”.

Para el nuevo “capitán optimista” del Hospital de Jaén, “la humanización en todos los ámbitos del centro es muy importante porque los pacientes están pasando un momento delicado que les supone vivir una experiencia a la que nosotros estamos acostumbrados, pero que para ellos no es agradable, por lo que si los profesionales podemos hacerle el ingreso más ameno, habremos aportado mucho a estas personas”.

Según la Fundación Hospital Optimista, los últimos avances en neurociencia y psicología positiva demuestran que el entorno tiene un impacto sobre los pensamientos, las emociones y conductas. “Podemos entrar en espirales virtuosas de bienestar y salud emocional y social cuando el entorno potencia nuestras fortalezas psicológicas y sociales, por ello nuestro objetivo es contribuir a la mejora de la salud psicosocial de los sanitarios, lo que repercute directamente en la salud de los pacientes fomentando las iniciativas o prácticas que contribuyan a la creación de un entorno optimista para los sanitarios, pacientes y sus familias”.