Galán y Chingotto ponen al rojo vivo el Nº1 tras ganar el mundial por parejas de Kuwait

 En Kuwait ha tenido lugar una tormenta de pádel. Bajo el paraguas del Mundial por Parejas, Ale Galán y Fede Chingotto han firmado una de las remontadas más memorables del año para coronarse campeones del mundo y encender, de paso, la batalla por el número uno. Frente a ellos, Arturo Coello y Agustín Tapia, los dominadores absolutos del circuito, han visto cómo su reinado empezaba a tambalearse ante una pareja que ha encontrado la fórmula perfecta entre talento y constancia.  

 El inicio no presagiaba nada bueno para los aspirantes. Coello y Tapia han salido con una autoridad aplastante, dominando la red y ejecutando cada punto con la precisión que les ha llevado a lo más alto. En apenas media hora se han adjudicado el primer set por 6-2, dejando la sensación de que la final sería un trámite más. Pero Galán y Chingotto no han llegado hasta aquí para rendirse.  

 En el segundo parcial, el argentino ha encendido la chispa de la rebelión. Fede Chingotto ha defendido cada bola como si fuera la última, resistiendo el vendaval con una tenacidad inquebrantable. Su ejemplo ha despertado a Galán, que ha empezado a imponer su potencia y su lectura del juego. La tensión ha sido máxima: Tapia y Coello han desperdiciado siete pelotas de break, mientras sus rivales han aprovechado la única que han tenido para romper en el momento clave. El 7-5 ha forzado el tercer set y ha cambiado por completo el rumbo de la final.  

 El desenlace ha tenido aroma épico. Galán y Chingotto han arrancado el tercer set con un break tempranero y ya no han soltado el control. Con el público entregado y la confianza por las nubes, han desplegado su mejor versión: un pádel agresivo, rápido y preciso. Los número uno, impotentes, no han encontrado respuestas ante un vendaval que ha cerrado la final con un contundente 6-2.  

 El título mundial por parejas les ha otorgado 2.000 puntos vitales y ha encendido la pelea por el trono. A falta del P1 de Dubái, el Major de México y el Tour Finals de Barcelona, la recta final promete emociones fuertes.