Movimiento de importancia en el seno de los Boston Celtics de cara a la próxima temporada. Tras la eliminación de la franquicia más laureada junto a Los Ángeles Lakers en la primera ronda de los playoffs a manos de los Brooklyn Nets por un contundente 4-1 los cambios no se han hecho esperar y han acabado con Danny Ainge fuera de la franquicia de Massachussets tras 18 años.
El nuevo director de operaciones de los Celtics será Brad Stevens el que fuera entrenador del equipo las últimas ocho temporadas en las que llevó al equipo a jugar y perder tres finales de la Conferencia Este. Stevens, uno de los técnicos más cotizados de la competición, asciende a manager y tendrá la palabra en todas las decisiones deportivas de la plantilla. La primera de ellas será la de buscar un nuevo inquilino para el banquillo del Boston Garden. El favorito en las quinielas es Jason Kidd.
Ainge, de 62 años, fue el arquitecto del último equipo campeón de Boston, el del 2008 con Paul Pierce, Kevin Garnett y Ray Allen, y es el tercer ejecutivo principal activo con más tiempo en el cargo de cualquier franquicia de la NBA, detrás de Pat Riley (Miami Heat, 1995) y Gregg Popovich con los San Antonio Spurs (1996).
A lo largo de sus 18 años con los Celtics, Ainge ha contratado solo a dos entrenadores, Doc Rivers, en 2004, después de su primera temporada a cargo del equipo, antes de sorprender con la elección del entonces joven entrenador de Butler University, Stevens, quien reemplazó a Rivers después de que se fuera a los Clippers en 2013 y que ahora dirige a los Philadelphia Sixers.