Alquilar un coche en verano es una opción habitual para disfrutar y conocer el lugar al que viajas, pero también puede suponer un quebradero de cabeza: la falta de información básica en el contrato y los cobros abusivos por presuntas anomalías en el momento de devolver el vehículo son los dos problemas más comunes.

Esos son los problemas más frecuentes con los que uno se puede encontrar a la hora de alquilar un coche, si tenemos en cuenta las 149 consultas y reclamaciones que ha recibido la Organización de Consumidores y Usuarios sobre esta cuestión en los últimos dos meses y medio.

El contrato no siempre incluye una información básica con las distintas cláusulas y excepciones, y de hecho a veces son datos que solo se ofrecen en la página web de la compañía.

Por eso, para evitar problemas, antes de firmar nada, se recomienda comprobar que el contrato cita expresamente el alcance de la cobertura del seguro, con sus exclusiones y franquicias, además del precio de la fianza, la identificación de los conductores, la duración del contrato, la forma de pago y los detalles sobre la recogida y devolución del coche.

Otro problema frecuente son los cobros posteriores por presuntos daños o defectos que no fueron detectados en el momento de la devolución del vehículo.

Para prevenir este tipo de cobros inesperados es aconsejable revisar con detalle el coche para verificar el estado en el que lo entregan (carrocería, luces, ruedas y tapicería) y hacer constar por escrito y con fotografías cualquier anomalía a la compañía antes de abandonar la oficina de alquiler. Cuando se devuelva el vehículo, también es recomendable acompañar al empleado durante la revisión del estado.

A estos problemas se unen otros, porque tampoco son raros los cargos por el servicio de repostaje de gasolina de más de 30 euros, cargos adicionales al propio coste de combustible, o los que a veces se suman por la limpieza.

Ambos cargos, según OCU, son costes improcedentes si no estaban incluidos expresamente en las condiciones del contrato.

En cualquier caso, antes de contratar nada se deben comparar precios entre distintas compañías y solicitar el precontrato de alquiler para ver las condiciones de cada una.

Y una vez contratado, se debe conservar toda la documentación sobre el alquiler, justificantes de pago y partes de daños. Si se contrata por teléfono, es conveniente que se solicite confirmación por escrito, y si es por internet se debe imprimir.

En caso de conflicto y ante una falta de acuerdo con la compañía, tendrá que recordar que el afectado puede recurrir a la vía judicial sin necesidad de abogado ni procurador hasta un importe máximo de 2.000 euros.