La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha afirmado que la orden ministerial en trámite para la conservación del lobo se ha elaborado con "el máximo diálogo y consenso posible", siguiendo las recomendaciones científicas y con el fin de "recuperar la convivencia".

"El lobo probablemente está pasando de ser visto como una alimaña a un animal con dificultades de expansión en el territorio y con una función en el ecosistema", ha manifestado Ribera durante su intervención en el Fórum Nueva Economía, celebrado este jueves.

Para la vicepresidenta, se trata de conseguir un "consenso, un equilibrio y una convivencia razonable" entre lobo y las explotaciones agrarias y velar porque, en caso de que haya que intervenir, se haga siguiendo las recomendaciones de las autoridades, con profesionales y medios oportunos, "pero nunca en formato de caza deportiva".

Durante su participación en el Fórum, que ha sido seguida entre el público por las ministras de Sanidad, Carolina Darias, y de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, Ribera ha respondido con un rotundo "no" al ser preguntada si le gustaría ocupar la Vicepresidencia primera en caso de una eventual remodelación del Gobierno.

"Estaré encantada de seguir o de irme y descansar tranquilamente si me tengo que ir y hay otra persona, pero no aspiro a nada más de lo que tengo, que ya es una responsabilidad enormemente apasionante pero inmensa", ha manifestado Ribera.

Respecto a la futura cumbre COP 26 (Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático 2021) que se desarrollará en Glasgow (Reino Unido) en noviembre próximo, Ribera ha hecho hincapié en que el objetivo es cumplir el Acuerdo de París, que compromete a los países a evitar que la temperatura media del planeta suba este siglo por encima de 1,5 grados.

Para asegurar que "París siga viable", la ministra ha apostado por afianzar importantes esfuerzos de reducción de emisiones, y ha destacado en especial el papel de Europa, que a su juicio, esta haciendo esfuerzos muy interesantes y a la vez complicados.

Hasta el inicio de la COP, Europa debe desempeñar un "papel de pivot" que refuerce la credibilidad con la agenda multilateral, no solo en clima, sino también en el modo de consumir y generar energía y de entender progreso e infraestructuras compatibles con la reducción de emisiones a la atmósfera, ha subrayado.

Entre otros de lo grandes temas de la agenda ambiental como son los recursos hídricos, la ministra ha destacado una inversión de 21.000 millones de euros durante los próximos siete años para acometer todas las reformas necesarias en materia de agua, uno de los recursos fundamentales para el desarrollo en "un país como España donde se trata de un tema muy sensible".

En estos tiempos hay que trabajar con "excesos y defectos", no solo con promedios del agua, ha continuado Ribera para incidir en que hay que hacer una gestión mas moderna, actual e inteligente de la gobernanza del agua, por lo que ha apostado por "un nexo nuevo que implique agua-gobernanza-digitalización".

La vicepresidenta ha abogado por un "consenso social" que implique avanzar en la transición ecológica, y poder construir así palancas que permitan ofrecer seguridad climática, económica y ambiental para todos los sectores, pero especialmente para los jóvenes.

Para Ribera, una de las noticias más positivas de este difícil año ha sido el Plan de recuperación y resiliencia y las implicaciones económicas que tendrá para España.

"España -ha recordado la ministra- tenía algunos elementos no exclusivos que lastraban la economía" como el hecho de que nuestro país "consume más recursos de lo que es capaz de generar el planeta de forma natural" lo que, ha dicho, ocasiona unos costes económicos y sociales "que llevará tiempo corregir".

Además, ha afirmado que el Plan ayudará a recortar la brecha de desigualdad social y territorial y dará oportunidad de "construir el futuro sobre pilares distintos" buscando proyectos con "gran implicación verde", que aprovechen los recursos naturales, la digitalización y no generen afección ambiental.