Que el fútbol es universal es una de las expresiones más recurridas. Iguala a todo el mundo y es capaz de provocar la felicidad de la gente en cualquier situación. Y se ha podido comprobar esta esta tarde en el complejo educativo de Cheste, Valencia, donde están acogidas algunas de las 630 personas rescatadas por el barco Aquarius y que el pasado domingo llegaron a la capital levantina. 

Muchos de ellos ha disfrutado de lo lindo en la tarde de este martes viendo el estreno de Senegal en la Copa del Mundo de Rusia de 2018 frente a Polonia, a la que se ha impuesto por dos goles a uno.

Los inmigrantes han celebrado los dos goles de Senegal con algarabía, como se puede ver en las imágenes. 

Un total de 415 hombres, 52 mujeres y nueve niños y niñas procedentes del Aquarius se encuentran en el complejo socio-educativo de Cheste, donde se encuentran bien de salud.

Las mujeres y los niños están alojados en un edificio, y en otro los hombres que llegaron solos al puerto de València, quienes ya han organizado una "pequeña liguilla" de fútbol y ya habían comunicado que tenían ganas de ver el Mundial. Este martes ya han empezado a celebrar goles.