Seguro que cuando estudiabas para sacarte el carnet de conducir, especialmente, el teórico, ponías especial atención a todo lo que tenía que llevar el coche en caso de emergencia y lo que podía pasar si no lo llevabas encima. Chaleco reflectante, una rueda o los triángulos de emergencia para señalizar una avería, son algunos de los que tienes que llevar siempre en tu vehículo.

Claro, que los tiempos van cambiando y con ello, todo lo que creemos conocer del carnet de conducir. Y es que ahora esos triángulos de emergencia de los que hablábamos ya no van a ser necesarios, porque se van a sustituir por otro dispositivo. Esta vez, se tratará de una señal luminosa que, en caso de avería, colocaremos encima una señal luminosa.

Una señal luminosa que, encima, tendrá integrado un sistema de geolocalización. De momento, no es necesario que nos hagamos con este dispositivo, pero lllegará un momento en el que sí que sea indispensable que lo llevemos encima y en el que ya, los triángulos de mergencia quedarán totalmente obsoletos.

La fecha en la que nos veremos obligados a llevar la señal luminosa

No te preocupes si todavía no tienes esa señal luminosa, porque, por ahora, tienes mucho margen para comprarlo. Y es que el 1 de enero de 2026 este dispositivo, conocido como V16, será obligatorio para todos los vehículos. Así ha informado la DGT, al tiempo que anuncia que, a partir de ahora, ya puedes empezar a utilizarla.

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Unas señales que, además, son visibles a unos 1000 metros de distancia, y al colocarla encima del vehículo, nos evita accidentes por no tener que salir a colocarlas a metros de distancia de nuestro vehículo. Eso sí, como todo, tiene un precio, y, para que lo sepas, estas señales luminosas te pueden costar entre 15 y 30 euros, siendo el precio medio unos 25 euros.

Ojo, porque la señal con geolocalización estará en el mercado, tal y como ha informado la DGT, a partir de diciembre.

La DGT desvela la velocidad a la que deberías conducir para ahorrar gasolina: hasta un 30% menos

La DGT ha señalado que debe ser la media entre el máximo de velocidad en las vías rápidas que es 120 km/h, y el mínimo, que está en 60 km/h. La cifra que recomienda la Dirección General de Tráfico es de 90 kilómetros por hora. Y además, advierte de que si aumentamos esa cantidad hasta el máximo permitido, estaríamos gastando hasta un 30% más.