La exjefa del departamento de disfraz de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de EE.UU., Jonna Mendez, ha revelado algunos de los trucos a los que recurren los espías para pasar desapercibidos o hacerse pasar por otra persona.

Mendez, durante más de 20 años jefa de disfraces de la CIA, asegura que lo primero que hacen los estilistas de ese departamento es estudiar a fondo los rasgos físicos de los agentes. Esta es la forma de poder alterar su apariencia por completo, señala en Wired. 

El informe de los rasgos del agente es fundamental

Mendez, que ahora trabaja en el Museo del Espías de Estados Unidos, es fácil hacer pasar a una mujer por un hombre, envejecer a una persona joven o hacer que parezca más gorda. Lo contrario, asegura, es prácticamente imposible hacerlo.

En muchas ocasiones, es necesario recurrir al maquillaje para evitar que un conocido les reconozca cuando están en medio de una misión. Además de pelucas, gafas o vello facial, las agencias de inteligencia también emplean maquillaje protésico e incluso diferentes tipos de prótesis bucales que modifican el rostro y la forma de hablar de una persona.

Un disfraz no es suficiente

Mendez asegura que también es crucial modificar el comportamiento, la forma caminar y de moverse. Jonna sabe que es sencillo reconocer a un estadounidense en otro país por la forma que tiene de utilizar los cubiertos o por cómo sujeta un cigarrillo. Por eso, destaca que incluso se puede cambiar la manera de caminar colocando accesorios en el zapato o utilizando vendas en las rodillas.

No te pierdas la transformación y los trucos que cuenta Mendez