Se le nubla la campaña electoral a Begoña Villacís. Las posibilidades de que la candidata de Ciudadanos acceda al sillón de Cibeles en las elecciones del 26-M podrían empezar a desinflarse.

Izquierda Unida ha presentado este lunes una querella criminal contra Villacís por la presunta comisión de un delito de actividades prohibidas a funcionarios y abusos en el ejercicio de sus funciones. Izquierda Unida considera que se ha vulnerado el artículo 441 del código penal, que contempla multas de seis a doce meses y suspensión de cargo público entre dos y cinco años.

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Según el texto de la querella, Villacís incurrió en falta de transparencia y ocultación de intereses, al no declarar que era administradora solidaria de una sociedad y de un gabinete jurídico. Además, la portavoz de Ciudadanos se habría beneficiado presuntamente de esa posición dado que usó la sociedad, constituida junto a su marido Antonio Suárez-Valdés, para construir su casa de más de 600 metros cuadrados así como otros dos inmuebles. También existen indicios de que Villacís pudo incurrir en incompatibilidades en el cargo ya que el bufete representa a un sindicato de la Policía municipal, que se querelló contra la concejala presidenta de Arganzuela y Usera, Rommy Arce.

Carlos Sánchez Mato, concejal presidente del distrito de Latina, señala: “No es un tema menor. Estamos hablando de que no se puede ser juez y parte en un asunto donde Villacís esperaba obtener un beneficio personal”.

La querella de Izquierda Unida especifica además que Villacís tendría que haberse abstenido en determinadas votaciones en el pleno municipal, de acuerdo a la ley. Se pide que sean llamados a declarar como testigos el marido de Villacís, Antonio Suárez-Valdés, así como el secretario del pleno, Federico Andrés López, y la propia Rommy Arce.

Begoña Villacís fue elegida concejal del Ayuntamiento de Madrid en mayo de 2015. Por ello, estaba obligada a realizar una declaración de bienes y actividades cada seis meses. Pero la portavoz de Ciudadanos “olvidó” declarar durante estos tres años que era administradora de una sociedad junto a su marido. Villacís ha asegurado esta mañana que la querella de Izquierda Unida no tiene ninguna viabilidad jurídica. La portavoz de Ciudadanos la atribuye al carroñerismo y electoralismo de esta formación de izquierdas.