La evolución epidemiológica de la Comunidad de Madrid sigue cosechando datos que nos confirman que seguimos en la segunda ola y que, por supuesto, no debemos bajar la guardia. Con datos a fecha del 12 de noviembre, y teniendo en cuenta que están en constante cambio... se calcula que desde el inicio de la pandemia, el número acumulado de ingresados en hospitales son 69.427 y 6.205 personas en UCIS.

Mercedes Carrasco, es subdirectora médico del Hospital Gregorio Marañón en Madrid. Una doctora que pelea de primera mano este virus y sabe la situación que atraviesa el centro desde dentro. Carrasco contaba a COPE que, de 913 camas, tienen 192 casos de pacientes covid y que los datos les están dando un alivio: "hemos notado una disminución importante respecto al mes pasado. El pico máximo fue en septiembre y ya en octubre fue disminuyendo la proporción de ingresos".

Ella interpreta los datos cada día, nos adelantaba, con actitud expectante en una situación positiva descendente. Tienen miedo de tener el hospital repleto como sucedió en la primera ola. "El 29-30 de marzo tuvieron 1064 pacientes covid ingresados. Y aprendimos que estamos capacitados para hacer un plan de estabilidad".

Este plan consiste en habilitar zonas del hospital para estos pacientes donde antes era impensable. "Se puso el material necesario para atender a enfermos en esos lugares: respiradores, personal adecuado", afirmaba a COPE la doctora.

¿Cómo están tratando a los enfermos y cuál es el tiempo medio de estancia en el hospital?

Respecto a los tratamientos que emplean, en el Gregorio Marañón tienen en activo 8 ensayos clínicos mediante antivirales que seleccionan con los servicios de neumología y medicina interna. Con ello tratan de paliar los síntomas y las molestias de los pacientes mientras llega la ansiada vacuna u otra alternativa.

El tiempo mínimo de estancia de los pacientes es de 7 a 14 días. En cambio, han tenido pacientes que han permanecido hasta 156 días de estancia en la UCI. Una auténtica barbaridad. Sin embargo, el alta no siempre es definitiva. Cuando el paciente sale del hospital han creado unidades multidisciplinares con otros profesionales para hacerles un seguimiento. Es ahí donde tratan las secuelas que deja el virus: alternaciones neurológicas, digestivas, cardíacas, efectos a nivel de la nutrición... Son las denominadas consultas evolutivas post-covid.

La doctora no ha perdido la oportunidad de recordar a los profesionales que han perdido la vida por el virus. "Es muy duro, te piensas que no te toca y luego lo ves que tienes alrededor. Sobran las palabras en esos momentos", decía.

Por último, un mensaje de responsabilidad por los rebrotes y la delicada situación. La ciudadanía tiene que asumir que puede ocurrirle y que la covid-19 no solamente puede perjudicar a uno mismo, sino a los familiares más cercanos. "Tenemos que prevenir, cuando tengamos una situación de riesgo hacer caso de las autoridades sanitarias y ponernos siempre la mascarilla. También cuando lleguen amigos y familiares a casa", aseguraba la facultativa.

Una situación que abre paso a la esperanza pero que debemos seguir de cerca. El coronavirus sigue presente. Prácticamente todas las autonomías están viendo restringida su movilidad y no hay que mirar hacia otro lado.