J.L. RESTÁN | LÍNEA EDITORIAL
Plan para el futuro de Irak
Línea Editorial de la Cadena COPE

Madrid - Publicado el - Actualizado
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El referéndum para impulsar una secesión del Kurdistán iraquí ha contado con una alta participación. De momento el líder de los kurdos iraquíes ha asegurado que la independencia no se va a producir de forma inmediata y que quiere negociarla con el Gobierno de Bagdad, que de hecho, está ausente del Kurdistán iraquí desde hace muchos años. El control de las fronteras, las labores de policía, el mando sobre el ejército, los famosos Peshmergas, está en manos del Gobierno Regional del Kurdistán Iraquí. Es difícilmente concebir un mayor grado de autogobierno.
Tras la caída de Sadam Hussein, que persiguió a sangre y fuego a los kurdos, estos casi han conseguido contar con un Estado propio. La debilidad que caracteriza a los gobiernos chiitas de Bagdad desde hace catorce años les ha ayudado. Los kurdos han sido esenciales en la derrota del Daesh. Pero la independencia no sería buena porque desestabilizaría la zona: supondría abrir un nuevo conflicto con los chiitas mayoritarios en Iraq y con los sunníes de Turquía.
Por todo ello es urgente un proyecto nacional para el Iraq que emerge tras la guerra contra el Daesh. Un proyecto en el que las comunidades chiitas, sunníes y la minoría cristiana, que es la que más sufre en las disputas, puedan convivir con suficiente libertad.