Este viernes, España ha dado un giro radical en su postura histórica sobre el Sáhara Occidental. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha enviado una carta al rey Mohamed VI en la que, según Rabat, sostiene que el plan de autonomía para el Sáhara Occidental planteado por Marruecos, que deja este territorio bajo soberanía marroquí, aunque con algunas competencias cedidas, constituye "la base más seria y realista" para lograr una solución a este conflicto.

Según el comunicado publicado por la Casa Real marroquí, en su misiva, Sánchez manifiesta que "España considera la iniciativa marroquí de autonomía, presentada en 2007, como la base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo". El Gobierno ha venido insistiendo en las últimas semanas en su apuesta por una solución política para el Sáhara Occidental mutuamente aceptable para las partes y en el marco de la ONU, apoyando en este sentido la labor del nuevo enviado de la ONU para el Sáhara, Staffan de Mistura.

Karima Benyaich, embajadora de Marruecos, fuera de España desde mayo de 2021

Una de las grandes preguntas que están ahora encima de la mesa es qué va a pasar con las relaciones diplomáticas entre Madrid y Rabat. La crisis, sin precedentes, entre España y Marruecos estalló en abril de 2021, cuando se desveló que el líder del Frente Polisario, Brahim Gali, estaba hospitalizado en Logroño, tras haber sido rechazado por Alemania y procedente de Argelia.

El 17 de mayo, Ceuta vivió una de las crisis migratorias más intensas de su historia, con la llegada de más de 5.000 inmigrantes en solo una jornada después de que bordearan a nado los espigones que separan las fronteras del Tarajal y Benzú. Un día más tarde, Marruecos llamó a consultas a su embajadora en España, Karima Benyaich, poco después de que fuera convocada en el Ministerio de Asuntos Exteriores español para dar explicaciones y mostrarle su rechazo ante la última entrada ilegal. El 19 de mayo, Benyaich, partía rumbo a Rabat y no ha vuelto a España desde entonces.

Además, unos días más tarde, la embajadora de Marruecos apuntaba que la crisis "ha desvelado las verdaderas intenciones implícitas y motivaciones de ciertos círculos en España, que persisten en querer dañar a los intereses superiores del Reino de Marruecos desde la recuperación del Sahara marroquí en 1975".

Con el cambio de postura de España respecto a la soberanía del Sáhara, se espera que Madrid y Rabat retomen sus relaciones diplomáticas, por lo que la embajadora de Marruecos podría regresar a nuestro país de manera inminente. Según apuntas varios medios, la vuelta a Madrid de Karima Benyaich, podría coincidir con la visita a Rabat que realizará el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, el próximo 2 de abril.

El caso de Alemania como precedente

En Alemania hay un caso que puede servir como precedente. Las relaciones entre Marruecos y Alemania se rompieron en marzo de 2021 con motivo de la disparidad de criterios relativos a la soberanía del Sáhara Occidental. En diciembre de 2021, Berlín mostró su apoyo al recién nombrado enviado especial para el Sahara del Secretario General de la ONU, Steffan de Mistura, en su búsqueda de un resultado político justo, duradero y mutuamente aceptable sobre la base de la resolución 2602 del Consejo de Seguridad.

Dos meses más tarde, los ministros de Exteriores de ambos países pusieron fin a un año de crisis diplomática y anunciaron el regreso de la embajadora marroquí tras 9 meses. Antes de este hecho, el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, remitió una carta a Mohamed VI calificando la propuesta de autonomía de Marruecos para el Sáhara como una "buena base" para llegar a un acuerdo y un "esfuerzo serio y creíble". Unos calificativos similares a los realizados por España este viernes. Por tanto, el regreso de la embajadora marroquí a nuestro país podría estar estrechamente vinculado al viaje del ministro de Asuntos Exteriores español, igual que ocurriera con Alemania.