Al menos diez militares afganos han muerto, incluidos dos oficiales, en un ataque de dos ataques de los talibán en Faizabad y Yaftal, ambos en la provincia de Badajshán, según fuentes oficiales.

El gobierno provincial ha confirmado el ataque talibán iniciado en la tarde del jueves contra ambos distritos, situados a las afueras de la ciudad de Faizabad.

Fuentes locales han apuntado en declaraciones bajo condición de anonimato publicadas por la agencia de noticias Jaama Press que hay diez fallecidos en el ataque sobre la zona de Yaftal e Bala, incluidos dos oficiales. Además, aseguran que hay varios militares que han sido tomados como rehenes.

Los talibán controlan ya gran parte del territorio que rodea a la capital provincial de Badajshán. Los milicianos se habrían hecho con varios vehículos militares y con armas y munición.

Los talibán han tomado en las últimas horas un total de nueve distritos en las provincias de Badajshán y Kandahar, nuevos avances enmarcados en una ofensiva que ha permitido a los insurgentes tomar nuevos territorios en todo el país mientras Estados Unidos se retira de la zona.

Así, los talibán han conquistado siete distritos de Badajshán en las últimas 24 horas, según han revelado los concejales de la zona Mohammad Zakir Aryan y Mahbub ul Rahman Talaat. Además controlan los distritos de Ghorak y Jakrez, en Kandahar, han explicado el diputado Jalil Ahmad Muyahid y el concejal Nematulá Wafa.

Además se han producido enfrentamientos en el distrito de Maruf, también en Kandahar, por lo que han advertido las autoridades que si no se reciben refuerzos de inmediato podrían ser superados por los atacantes.

Los talibán por su parte han informado de la toma de los tres distritos. Igualmente hay enfrentamientos en el distrito de Kalfgan, provincia de Tajar, en el norte del país, informan concejales de la zona.

Los avances de los talibán, que han lanzado numerosas ofensivas durante los últimos meses, han llegado a pesar del proceso de conversaciones de paz y en medio del repliegue de las tropas internacionales, lo que ha provocado preocupación en el seno de la comunidad internacional.

Este mismo sábado se ha informado de la salida el viernes del último militar estadounidense de la base aérea de Bagram, al norte de Kabul, tras casi 20 años de presencia ininterrumpida. Esta base era de la que dependían realmente todas las operaciones del Ministerio de Defensa afgano.