Este viernes despegan de la base aérea de Los Llanos, en Albacete, los dos primeros aviones con cargamento de armas, que va a enviar España a Ucrania. Este primer paquete, que terminará de enviarse en otros dos aviones que saldrán este sábado, incluye un total de 1.370 lanzagranadas anticarro, 700.000 cartuchos de fusiles y ametralladoras ligeras, todo ello procedente del Ejército de Tierra, según ha explicado la ministra de Defensa, Margarita Robles.

Este envío "demuestra que España y sus Fuerzas Armadas son absolutamente solidarias y comprometidos en la defensa de la paz", ha apuntado Robles, calificando el envío de "importante" porque permitirá "una defensa muy individualizada" que podrá ser utilizada por "personas que no tienen una gran experiencia en la utilización de armas".

¿Cómo llega el armamento de España a Ucrania?

Uno de los problemas principales en el envío, tanto de armamento como de ayuda humanitaria, en situaciones de guerra, es lograr que la mercancía llegue a su destino, debido a las limitaciones del transporte aéreo, el colapso de algunas vías terrestres y la destrucción de otras. Los países europeos que están realizando envíos en los últimos días, están priorizando la vía aérea hasta Polonia y desde ahí se hace llegar al ejército ucraniano.

Por tierra, lo más factible es que el material entre por la frontera entre Ucrania y Polonia, debido a que Rumanía se ha negado a permitir el paso de armas por su territorio y la frontera con Eslovaquia cuenta con una orografía más complicada, debido a las montañas. Lo que no está claro es mediante que medio llegarían las armas hasta Ucrania. En algunos medios se habla de posibilidad de que se utilicen aquellos en los que salen los refugiados, pero en su viaje de vuelta con combatientes del exterior o ucranianos que vuelven a su país para defenderlo.

Lo que sí se puede confirmar es que, según ha explicado el investigador de Seguridad Europea del Instituto Real de Servicios Unidos Ed Arnold al medio 'DW' hay dos rutas que son más factibles. Una de ellas pasa cerca de la frontera con Bielorrusia y otra algo más al sur.

En el caso de España, el primer paso es llegar hasta Polonia en un avión del Ejército del Aire, que se espera que aterrice en un punto cercano a la frontera con Ucrania. Allí "serán recogidos por las autoridades ucranianas", según ha apuntado Margarita Robles. De este modo llegó el pasado domingo el primer envío de ayuda sanitaria y material de defensa que realizó España con mascarillas, guantes, cascos y chalecos, entre otros.

En el momento en que aterriza el material, las tropas estadounidenses presentes en la zona se encargan de los trabajos logísticos, según recoge 'ABC'. Más adelante, son las fuerzas polacas las que protegen al ejército ucraniano en su regreso hasta la frontera con el material ya en sus manos. Una vez dentro de Ucrania, es su ejército el que debe decidir cuál es la ruta más segura para distribuir las armas a los militares y ciudadanos que se encuentran luchando.

Discrepancias en el Gobierno de coalición

El envío de armas ha generado ciertas discrepancias en el Gobierno de coalición. En un primer momento, España solo iba a enviar material sanitario a Ucrania, y no armamento. Una decisión que cambió en 24 horas y, finalmente, fue el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el que confirmó el envío de armamento, en su comparecencia en el Congreso este miércoles.

Sin embargo, varios ministros del Gobierno pertenecientes a Podemos se han mostrado contrarios a esta postura. El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, apunta que la decisión de Sánchez de enviar armas a Ucrania es un error que contribuye a la escalada bélica, la misma postura que mantienen la Ministra de Igualdad, Irene Montero y la secretaria general de Podemos, Ione Belarra.

Por contra, Yolanda Díaz apoya el derecho a la legítima defensa de Ucrania y respalda las decisiones que adopte Sánchez: "La política exterior de España la lidera el presidente del Gobierno". Díaz ha señalado que los gobiernos están a veces para tomar decisiones muy difíciles y, ante las diferencias de criterio entre los ministros de Unidas Podemos, ha dicho que el Ejecutivo goza de buena salud, una posición que comparte con el Ministro de Universidades Joan Subirats.