Una mujer y su hija han convivido casi un año con el cadáver de su madre en un chalé de la localidad malagueña de Istán, un hecho que investiga la Guardia Civil para aclarar las circunstancias de la muerte y la razón por la que no alertaron de su fallecimiento.

Fuentes cercanas a la investigación han confirmado a Efe que el cuerpo fue descubierto por los agentes oculto bajo un colchón de plástico y unos cartones, con ropa de calle puesta y algunos ambientadores vacíos alrededor, noticia que adelanta hoy el diario Sur de Málaga.

La hija de la fallecida fue la persona que confesó los hechos después de que el exmarido de la difunta lo descubriera y advirtiera de que había que contar lo sucedido y, tras desplazarse la Guardia Civil al lugar de los hechos, se comprobó que el cuerpo de la mujer estaba ya momificado.

Se investiga la fecha exacta en la que murió así como las circunstancias por las que madre e hija convivieron durante meses con el cadáver, entre las que podría ser por cobrar la pensión o la imposibilidad de afrontar el gasto del sepelio.