El presidente Pedro Sánchez, ha dudado este martes en el pleno del Senado de si el actual Gobierno de Andalucía tiene la visión suficiente para hacer realidad la oportunidad que representan para Andalucía las medidas de lucha contra la desigualdad y reindustrialización previstas en los Presupuestos Generales del Estado y en la gestión de los fondos europeos.

En respuesta a una pregunta de la senadora Pilar González Merino, del Grupo Parlamentario de Izquierda Confederal por Adelante Andalucía, centrada en la desigualdad que esta comunidad autónoma sufre desde hace décadas, Sánchez ha puesto en valor la lucha contra este problema que plantean los Presupuestos de 2022.

Así, ha hecho una defensa de la respuesta socialdemócrata a la crisis económica de la COVID, una respuesta que está permitiendo recuperar datos de empleo anteriores a la pandemia, y la ha puesto en contraste con la respuesta neoliberal a la crisis financiera de 2008.

En ese contexto, ha criticado el recorte de las pensiones del PP en 2013 y a la Atención Primaria, que tuvieron excepciones, ha señalado, como la que representó Andalucía con el anterior Ejecutivo, el socialista.

España es un país desigual, lo era antes de la pandemia y tras ella las brechas han aumentado, ha dicho. Sin embargo, en contraste con la anterior crisis, la financiera de 2008, lo que estamos viendo ahora es un cambio de paradigma".

"La ciudadanía se ha percatado de que aquellos que trataban de convertir entonces las pensiones o la salud en una mercancía no solo son un peligro para la salud, sino también para la economía, ha señalado.

La socialdemocracia propicia recuperaciones justas y eficientes, ha añadido, antes de citar el ingreso mínimo vital aprobado por su Ejecutivo y que beneficia a 800.000 compatriotas, de ellos 400.000 niños y niñas, o la revalorización de las pensiones, de la que se van a beneficiar 98.000 mayores en Andalucía.

Luego se ha referido a los fondos europeos que significan una gran oportunidad para Andalucía, porque tienen que estar vinculados con la reindustrialización. La transición energética va a redefinir la ubicación de mucha de esa industria. Andalucía tiene los mejores mimbres para aprovecharlo. Pero la única duda que tengo es si el actual Gobierno andaluz tiene la visión suficiente para hacer esto realidad.