La Fiscalía pide en sus conclusiones provisionales cinco años de prisión para un trabajador de una empresa de servicios informáticos que al saber que iba a ser despedido provocó un ciberataque que afectó a más de 3.000 ordenadores de 839 oficinas de toda España del Banco Santander.

La Audiencia Provincial de Madrid ha señalado para el próximo viernes el juicio, en el que el acusado, J.F.D.S., se enfrenta a dicha petición de pena como presunto autor de un delito de daños informáticos.

El Ministerio Público señala en su escrito de acusación que J.F.D.S. era trabajador de la mercantil Norma 4, que su vez prestaba servicios informáticos a Produban, y, en calidad de administrador de red, los realizaba para el Banco Santander.

Añade que "con ánimo de menoscabar el patrimonio ajeno", el acusado creó una "bomba lógica", consistente en una aplicación que va incrustada en otros códigos y cuyo principal objetivo es realizar un ataque informático al ordenador para borrar ficheros e incluso inhabilitar por completo el sistema operativo de un PC.

El fiscal explica que dicha bomba lógica tenía capacidad de permanecer inhabilitada hasta que se cumpliera el plazo de tiempo del trabajador en la empresa y al activarse el día 20 de marzo de 2017 provocó el fallo de los equipos informáticos en lo siete días siguientes.

Además de la pena de prisión, la Fiscalía solicita que se le imponga al acusado una multa de 876.713 euros y que indemnice a la empresa Produban con 292.237 euros y al Banco Santander en cantidad que se determine.