El nuevo consejero nato del Consejo de Estado, Benigno Pendás, ha recomendado legislar "menos y mejor", así como "atender a las novedades" y perseguir cualquier quiebra del Estado de derecho, "todo sea para evitar el camino de regreso al populismo y hagámoslo todo y bien".

Pendás, recién nombrado presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, ha tomado posesión este jueves como nuevo consejero nato del Consejo de Estado.

Sus padrinos han sido el consejero permanente Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón y el consejero nato Santiago Muñoz, en un acto presidido por María Teresa Fernández de la Vega, presidenta del Consejo de Estado.

Tras jurar el cargo, ser investido y tomar posesión de su sillón, Pendás, en su discurso, se ha referido a los vínculos "muchos y notables" entre el Consejo de Estado y la Academia que preside.

Ha ensalzado a las reales academias, que ocupan "un lugar relevante en el panorama intelectual en el marco de la democracia constitucional en esta época confusa" y ha añadido que "las grandes naciones cuentan con grandes instituciones", que vertebran una sociedad abierta y en libertad.

Se ha definido como un profesor universitario vocacional y ha asegurado que "vivimos en un umbral de épocas, en un mundo post, moderno, democrático o capitalista, y ext Unión Soviética".

"Era ya una época incierta, insegura y confusa -ha continuado- y entonces llegó la pandemia, lo que produjo una profunda conmoción, con nuevas preocupaciones y el anticipo de una sociedad virtual, bajo la amenaza de la crisis económica y un desafío al orden constitucional".

Para Pendás, "la respuesta ofrece luces y sombras" y "estamos lógicamente preocupados", porque "nada teme más el hombre que ser tocado por lo desconocido".

En su opinión, el Consejo de Estado "puede y debe actuar como motor y guía", porque han llegado "cambios sustanciales en el mundo jurídico" y "hay que llevar hasta la frontera la seguridad jurídica".

Ha reconocido que "nos inquieta el futuro" y se ha referido al "abuso del decreto ley de todos los gobiernos, las leyes promocionales cargadas de retorica estéril, la muy mejorable calidad técnica de los textos legislativos o los defectos notorios del procedimiento legislativo", como preocupaciones del Consejo de Estado.

Por todo ello, ha recomendado legislar "menos y mejor" y atender a las novedades, especialmente las que vengan de la robótica e informática.

Fernández de la Vega, en su discurso de bienvenida, ha aludido a la "fructífera relación" entre el Consejo de Estado y la Real Academia; ha recordado que Pendás ya ha sido consejero por un cargo anterior y ha agregado que sus aportaciones contribuirán a mejorar los dictámenes.

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Ha coincidido en que la humanidad tiene la sensación de que se está produciendo un "salto de gigante, que dará paso a un cambio de era" y que en ese mundo nuevo el derecho tiene que ser capaz de "materializar estas realidades", porque el "nuevo mundo virtual habrá que regularse también".

Fernández de la Vega ha aludido a la función consultiva del Consejo, que "no es de potestad sino de autoridad" y está relacionada con el saber y no con el poder, al ser "inteligente y sabia como la Academia". EFE

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