La directora de la Guardia Civil, María Gámez, está recibiendo clases de inglés para que adquiera mayores conocimientos en este idioma. Hace varios meses, la formación popular preguntaba a Interior por estos cursos que se estaban impartiendo a la cúpula del ministerio. El departamento ha confirmado que dichas enseñanzas comenzaron a impartirse el 15 de enero y que concluirán el próximo 10 de diciembre "con un máximo de 294 horas en total, a repartir entre todos los alumnos". Según cuenta Vozpópuli, el importe del contrato es de 14.972 euros, y la directora de la Benemérita estaría recibiendo clases particulares en modalidad presencial.

"El objeto de estos cursos es aumentar las habilidades de comunicación de los alumnos en el mencionado idioma para, fundamentalmente, su asistencia a reuniones de alto nivel con sus homólogos de otros países", justifica el departamento de Grande-Marlaska. La destreza de los políticos españoles en el manejo del inglés, es un tanto cuestionable. De hecho, hay a algunos políticos que también necesitarían clases como Gámez para mejorar sus competencias en este idioma. En la memoria de la ciudadanía se encuentra aquel "Relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor", de Ana Botella.

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Felipe González tampoco dominaba el inglés de manera correcta en comparecencias oficiales, ni Suárez. José María Aznar tampoco tenía destrezas dignas de reseña en este idioma, a pesar de que realizó algún que otro intento. El actual presidente del Gobierno, sin embargo, sí mantiene discursos fluidos en esta lengua extranjera, lo que le diferencia de sus antecesores. Rajoy tampoco se atrevía a responder en inglés cuando algún periodista trata de sacarle alguna palabra.

José Luis Rodríguez Zapatero, también trató por todos los medios de esquivar preguntas que no fuesen en castellano. Y, cuando lo intentaba, las redes se le echaban literalmente encima. En el año 2017, Zapatero acudió a una charla en Oxford sobre la Europa post-Brexit y el futuro de la globalización, y las críticas no se hicieron esperar.

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El exvicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, aseguraba a través de su currículum que tenía un nivel alto de inglés. Sin embargo, en una charla organizada por la ONU demostraba lo contrario. En dicha intervención, Iglesias llegó a reconocer que no sabía "cómo se dice ERTE en inglés".

A pesar de estos ejemplos, también hay cabida para la esperanza. Espinosa de los Monteros, portavoz parlamentario de Vox en el Congreso, ha demostrado en muchas ocasiones su gran nivel tanto de inglés como de francés.

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?? @ivanedlm explica en inglés ???? la defensa de España y el Estado de Derecho que ejerce VOX en el Tribunal Supremo: pic.twitter.com/J8iycSAkTG

— VOX ???? (@vox_es) February 12, 2019

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El líder popular Pablo Casado también se defiende. En una entrevista concedida a la CNBC, demuestra una fluidez que envidiarían sus compañeros de partido.

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Sin embargo, y a pesar de estos ejemplos en los que algunos políticos sí son capaces de mantener una conversación fluida en esta lengua, la regla general es que traten de esquivar hacer el ridículo por todos los medios. Suponemos que es lo que Gámez, directora de la Benemérita, no quiere alcanzar. De ahí las clases particulares de inglés para salir airosa de cualquier situación en la que deba emplear este idioma.