Falta menos de un mes para que miles de alumnos vuelvan a ocupar las aulas que dejaron vacias en el mes de marzo, cuando se inició el confinamiento. De esta forma volverán las clases, las tareas diarias y los patios recobrarán su habitual estampa, repleta de niños pequeños con ganas de aprender y de jugar, aunque ambas van a tener que ser de una forma diferente.

Hasta el momento, poco o nada sabemos de cómo va a ser esta 'vuela al cole' en plena pandemia de coronavirus, pero sí que hay una intencionalidad de que los más pequeños de la casa vuelvan presencialmente a las aulas, por los beneficios psicológicos y académicos que estos tienen.

Las decisiones importantes, en agosto

No en vano, las familias se muestran con preocupación, ya que esta vuelta va a ser muy diferente a la de cursos anteriores y no hay órdenes claras por los diferentes órganos administrativos. En este sentido, el pasado viernes la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, anunció que esta vuelta a las aulas se va a afrontar a tan solo dos semanas de que llegue septiembre, lo que va a generar que los padres cuenten con muy poco tiempo para organizarse.

"La última semana de agosto, ya fijaremos fecha, celebraremos una Conferencia de Presidentes que versará sobre el estatus de planificación del nuevo curso escolar. Una propuesta muy bien asentida, muy bien acogida por todos los presidentes y presidentas aquí presentes porque entendían que era absolutamente necesario establecer pautas de coordinación en este sentido", explicó la ministra en La Rioja tras la posterior Conferencia de Presidentes.

De momento, solo hay una orden publicada por el Ministerio de Educación y Formación Profesional en el BOE del pasado 24 de junio donde se dan 14 puntos que ayuden a las comunidades autónomas a iniciar esta vuelta a las aulas. Unos puntos que fueron negociados con 15 comunidades autónomas, con excepción de País Vasco y Madrid. Los ejecutivos de estas dos comunidades se mostraron en contra de aceptar esos puntos y han iniciado diferentes iniciativas para afrontar septiembre.

La presencialidad

Una de las cosas que más claras han dejado este confinamiento es que las administraciones no estaban del todo preparadas para dar clase vía online. Un proceso de digitalización que se ha tenido que dar en apenas horas para que los alumnos no pierdan ningún conocimiento correspondiente a su etapa escolar. Aun así, las comunidades autónomas y el Gobierno han considerado oportuno hacer "planes de seguimiento y apoyo para el alumnado que experimente mayores dificultades en las circunstancias actuales".

Y es que la presencialidad en las aulas, no es un tema baladí. Así lo dejó claro la propia ministra tras la reunión con todos los presidentes autonómicos y en la que estuvo presente el Rey. En este sentido, la orden ministerial publicada en el BOE también pone en valor asistir a las aulas de forma presencial

"La experiencia de este curso ha confirmado la importancia de la presencialidad para el desarrollo habitual de las tareas educativas y formativas, por lo que las administraciones educativas realizarán todos los esfuerzos necesarios para asegurar la modalidad presencial en todas las enseñanzas, niveles y etapas educativas", indica la orden en alusión a la suspensión de las clases presenciales en marzo por el confinamiento, que provocó adaptar la enseñanza a una modalidad telemática y a distancia en toda España.

Uno de los puntos claves que sabemos, aparte de la presencialidad, es que se van a tener que tomar estrictas medidas de seguridad y con un máximo de alumnos en clase. Todo ello en un curso 202-21 que va a comenzar en septiembre y que va a contar con 175 horas lectivas.