Ciudadanos (Cs) tiene en su mano decidir, en las próximas semanas, si el secretario general del PSOE, Javier Lambán, mantiene la presidencia del Gobierno autonómico o el centro derecha vuelve al Pignatelli tras cuatro años de mayoría parlamentaria de la izquierda. La mayoría absoluta pasa por sumar 34 escaños.

Escrutado el 99,20 por ciento de los votos, la formación naranja ha logrado 12 de los 67 escaños, con el 16,70 por ciento de los votos, que con los 24 del PSOE, el 30,83 por ciento, suman 36 escaños. Cs también puede conformar gobierno con el PP (16), PAR (3) y Vox (3).

El escrutinio de las más de 2.000 mesas electorales de Aragón ha dado algún susto a los partidos durante la noche electora, ya que la escasa distancia entre los bloques de izquierdas y derechas en el Parlamento aragonés, donde los 67 escaños exigen una mayoría absoluta de al menos 34 votos, ha oscilado durante horas, siendo favorable a la izquierda en las primeras horas para después evolucionar hacia la derecha. Finalmente, al arrebatar Ciudadanos un diputado al PSOE en la circunscripción de Zaragoza, se pueden dibujar dos posibles mayorías, en ambos casos con Cs, en el sentido expresado.

Siendo socialistas y naranjas partidos de ámbito nacional, los líderes regionales tendrán que escuchar la opinión de las direcciones nacionales, aunque tanto Albert Rivera como el aragonés Daniel Pérez no se han mostrado proclives a mantener las políticas de izquierdas que han desarrollado Pedro Sánchez desde La Moncloa y Javier Lambán en el Pignatelli.

El PSOE es el partido más votado y ha acumulado en estos comicios 24 escaños, por 18 de la ocasión anterior, en 2015, cuando el PP de Luisa Fernanda Rudi alcanzó los 21 diputados regionales y fue el partido mayoritario en votos y escaños, aunque al final fue Javier Lambán quien pudo gobernar al sumar una mayoría de 35 escaños con los 14 de Podemos, los dos de Chunta Aragonesista y el de IU.

En esta ocasión, el PP ha bajado de 21 a 16 diputados, con el 20,97 por ciento de las papeletas, pero la derecha incluye también al PAR, que conserva tres de seis escaños y el 4,93 por ciento de los votos, y a Vox, que irrumpe en la cámara regional con tres escaños y el 6,04 por ciento de apoyos, también en los principales ayuntamientos, por lo que igual que la izquierda sumó la mayoría necesaria para gobernar sin ocupar el primer puesto, ahora la derecha rebasa los 34 escaños imprescindibles para estabilizar el nuevo Gobierno, pese a que el PP sea el segundo y no el primero más votado.

DESCENSO IMPORTANTE DE PODEMOS

Además, Podemos-Equo experimenta un retroceso importante como el sufrido por Pablo Iglesias en las recientes elecciones generales del 28 de abril y pasa de 14 a cinco escaños, al obtener el 8,11 por ciento de los votos, reproduciendo el fenómeno de retroceso del populismo de izquierdas en toda España.

Mientras Vox consolida el buen resultado obtenido por el populismo de derechas el 28A en Aragón, cuando obtuvo un diputado al Congreso por Zaragoza y entra en las Cortes con tres asientos, un éxito multiplicado al poder formar parte de la mayoría de gobierno, si se produce así.

Mientras tanto, el PAR continúa su descenso paulatino que le ha llevado en dos décadas de presidir el Gobierno regional a luchar para mantener su grupo parlamentario, lo que exige un mínimo de tres diputados, los que ha conseguido esta noche.

Chunta Aragonesista (CHA) se recupera ligeramente, aprovechando el viento de cara de una destacada gestión de su presidente, José Luis Soro, como consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda en el Gobierno saliente, y pasa de dos a tres diputados, con el 6,16 por ciento.

Por último, el coordinador general de IU Aragón, Álvaro Sanz, toma el relevo de Patricia Luquin, renovando el escaño único que tuvo la coalición de izquierdas en la legislatura ya concluida, con el 3,33 por ciento de las papeletas.