El peor escenario posible en unas elecciones. El apretado escrutinio entre los dos candidatos a la Casa Blanca - el demócrata Joe Biden y el republicano Donald Trump - y la dependencia del voto por correo, masivo por la pandemia del coronavirus, ha sumergido la batalla por la Casa Blanca en una absoluta incertidumbre. Los dos candidatos defienden su triunfo e incluso el aún presidente Donald Trump presupone un 'fraude' electoral por el conteo de votos que están reduciendo su ventaja en los Estados clave. Ocho de ellos todavía tienen pendiente por decidir al ganador, una suma de votos electorales imprescindibles para dirimifr quién será el próximo inquilino de la Casa Blanca.

Además, todavía se desconocen los resultados definitivos para el Congreso, aunque los republicanos parecen haber salvado el Senado y reducido su desventaja en la Cámara Baja al contrario de lo que pronosticaban las encuestas, que daban a los demócratas el control total del Legislativo.

PENSILVANIA

En el vital estado de Pensilvania, con el 82 % del escrutinio, Trump tiene una ventaja de algo más de 400.000 votos, con un 52.6 % del voto a su favor. Un estado en el que cada vez más, Joe Biden está consiguiendo la todavía amplia ventaja del republicano. Zonas tradicionalmente demócratas, Filadelfia y Pittsburgh, aún tiene que procesar varios centenares de miles de votos, por lo que es de esperar que Biden recorte su desventaja, algo que poco a poco ya está haciendo.

Sin embargo, el proceso podría llevar tiempo. El condado de Allegheny, que incluye Pittsburgh y las zonas residenciales del sur de la ciudad, anunció este miércoles por la mañana que había suspendido el recuento de votos y que lo retomará sobre las 13.30 hora local (18.30 GMT). Las autoridades locales de ese condado, además, planean reunirse a las 10.00 hora local (15.00 GMT) para ver cuáles son los siguientes pasos.

Además, otros condados de Pensilvania han dicho que no comenzarán el recuento de voto por correo hasta este mismo miércoles por la mañana, pese a que la ley del estado les permitía comenzar en la misma mañana de la jornada electoral. De hecho, Pensilvania permite que los votos enviados antes de la jornada electoral sean contabilizados hasta tres días después del día de las elecciones, por lo que muchas papeletas podrían no entrar en el escrutinio hasta finales de la semana.

Con todo, a lo largo del miércoles el recuento podría avanzar y formar una foto más clara de la configuración de los votos y posiblemente, incluso dar a Biden ventaja frente a Trump.

GEORGIA

Georgia es un estado tradicionalmente republicano y donde un demócrata no gana desde 1992, pero esta vez la contienda parece más apretada debido a un posible aumento de la participación de afroamericanos en favor de Biden.

Con el 93 % escrutado, Trump lidera el recuento con un 50,2 % del voto, mientras Biden acumula el 48,6 %, aunque todavía quedan por contar las zonas más demócratas del estado, especialmente los condados de la ciudad de Atlanta y las zonas residenciales que la rodean.

En el condado de Fulton, el más poblado del estado y predominantemente demócrata, a las 00.30 hora local (05.30 GMT), cinco empleados estaban en el estadio State Farm, que funciona como centro electoral, todavía contando las papeletas que se habían depositado por adelantado, según la portavoz del condado, Regina Waller.

El problema fue que, el martes por la mañana, una tubería de agua se reventó, lo que provocó un retraso de dos horas en el recuento, según las autoridades del condado, que aseguran que ningún voto se ha visto perjudicado.

NEVADA

Nevada es otro de los estados que se considera clave para el resultado, aunque ningún candidato republicano a la Presidencia lo ha conquistado desde 2004. Con un 86% escrutado, Biden lidera el recuento con un 49,3 % de los cotos frente a Trump, que acumula 48,7 %, apenas 8.000 votos.

El miércoles por la mañana, las autoridades electorales del estado avisaron de que no comunicarán más resultados electorales hasta las 09.00 hora local (17.00 GMT) del jueves. Todavía no se han empezado a contar las papeletas que llegaron antes de la jornada electoral, lo que podría favorecer a Biden, ya que se espera que los demócratas hayan votado por adelantado en mayor proporción que los republicanos.

CAROLINA DEL NORTE

La igualdad también es extrema en Carolina del Norte, donde se reparten 15 votos electorales. El escrutinio está ya al 95% y Donald Trump es de momento el vencedor. Sin embargo, la diferencia entre ambos candidatos es de más de 80.000 votos. El recuento podría dilatarse puesto que este Estado acepta votos por correo hasta el 12 de noviembre, siempre que se hayan enviado antes de la jornada electoral. Para Trump, este Estado es clave para revalidar su permanencia en la Casa Blanca.

ARIZONA

Arizona podría estar ya decantado. Este Estado, de 11 votos electorales, es uno de los que cambia de color en estas elecciones. Donald Trump se impuso aquí en 2016 a Hillary Clinton, pero al 86 % escrutado Biden gana la batalla con más de tres puntos. La cadena Fox News, de marcado carácter conservador, le ha dado la victoria al demócrata pese a tener todavía muchas papeletas por contar. En su comparecencia, Trump consideró que el triunfo en Arizona no era "imprescindible" para hacerse con la victoria final.

ALASKA

Alaska es el Estado más decantado de los que aún quedan por sumar. Con un 56% de voto escrutado, Trump se impone con el 62.9 % de los apoyos en un territorio en el que ya ganó el republicano hace cuatro años. En un duelo tan cerrado, podría ser incluso imprescindible el compromisario que aún queda por decidir en Maine, uno de los dos Estados en los que el bloque ganador no suma todos los votos electorales.

¿QUÉ NECESITAN TRUMP Y BIDEN PARA GANAR?

A falta de sumar estos Estados, Biden cuenta en estos momentos con 253 votos electorales frente a los 214 que atesora Trump. Si Biden confirma Arizona, serían 263 apoyos para el demócrata. Para Biden es imprescindible sumar el triunfo en dos de los estados del 'cinturón de óxido, donde Clinton perdió hace cuatro años la presidencia. Wisconsin y Michigan ya se han teñido de azul. Biden sólo necesitaría sumar Nevada o Pensilvania para hacerse con la Casa Blanca.