Todas las encuestas ya apuntaban a lo que ha acabado por hacerse realidad, la caída de Ciudadanos. Una formación que pasa de ser vencedora en los comicios en el peor momento del 'procés' a ser el partido que más ha sufrido un descenso en el número de votos y escaños. Estos resultados dejan a Carrizosa y a Arrimadas en una mala posición pues compartían el grueso de la campaña.

Por este motivo, Ciudadanos ha convocado mañana un Comité de urgencia ante el descalabro en las urnas. La reunión del órgano de dirección de Cs se celebrará de forma presencial en la sede del partido en Madrid a las 19:00 horas.

El candidato de Cs a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Carrizosa, ha afirmado que Cs no ha sabido movilizar al electorado constitucionalista como hubiera querido para el 14F y que seguirán trabajando en el Parlament "desde la moderación y la capacidad de pacto".

En su intervención para valorar los resultados del 14F, ha insistido en que el partido seguirá "haciendo lo mismo que ha hecho desde el año 2006: defender al constitucionalismo desde el centro, y con absoluta firmeza en la lucha por las libertades en Cataluña y la democracia".

Para Carrizosa, es una mala noticia el aumento de escaños de los partidos independentistas, que considera que no representa a la mayoría de la sociedad catalana: "No tienen esa mayoría social, pero sí que van a tener una mayoría más amplia en el Parlament".

La estrategia de campaña de Ciudadanos

La líder naranja, Inés Arrimadas, ha realizado la campaña junto a Carrizosa como si fuera una candidata más. El candidato propuesto por Cs chocó con lo votado en las primarias, pues la elegida fue Lorena Roldán que acabó siendo apartada por la dirección del partido. Tras el adiós de Roldán, Ciudadanos insistió en reivindicarse como la fuerza constitucionalista que ocupa el centro, en contraste con el PP y Vox, por un lado, y el PSC, por el otro.

Arrimadas peleaba por obtener escaños con Carrizosa que intentaba 'pescar' a los indecisos a última hora. El candidato de Ciudadanos realizaba un llamamiento a la "votación masiva del constitucionalismo". "El constitucionalismo debe movilizarse si es que queremos abrir una nueva etapa de convivencia y de cambio en Cataluña", decía en declaraciones tras votar en su colegio electoral en la calle Balmes de Barcelona, acompañado a la salida de la líder del partido, Inés Arrimadas.

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El gran discurso que han querido trasladar desde Ciudadanos en esta campaña es asegurar que son los únicos que pueden garantizar que el PSC no apoye finalmente a ERC. Recordamos esos apoyos que realizó la formación para que el estado de alarma siguiese vigente en nuestro país.

Además, en los micrófonos de 'Herrera en COPE' Carlos Carrizosa también hizo campaña. El candidato aseguró que se sentaría con el diablo para echar a los independentistas. "Pactaré un gobierno en el que pueda estar Cs porque somos un partido de centro y podemos pactar a la izquierda y a la derecha”, manifestaba.

Las marchas sonadas que se han producido en la formación naranja

La hasta ahora portavoz de Cs en el Senado y el Parlament, Lorena Roldán, se convertía en la número 2 de la lista del PP a las elecciones catalanas. Así anunciaba su marcha a finales de 2020 para apostar por Alejandro Fernández: "Hoy finalizo mi etapa en Cs. Una decisión difícil pero muy meditada. Mi compromiso con la libertad y la convivencia sigue igual de vivo que el primer día y, por eso, quiero anunciar que seguiré defendiendo esos valores desde el proyecto de Fernández. Gracias por la confianza".

Una marcha que no se convirtió en la primera pues Ciudadanos también rompió con Valls en Barcelona por apoyar la investidura de Colau.

Esta decisión la adoptaba a finales de 2019 la Ejecutiva del partido, según explicaba la que era por aquel entonces la portavoz del partido, Inés Arrimadas. El grupo que lideraba Manuel Valls en el Ayuntamiento de Barcelona se quedaba sin representante en la reunión previa a la junta de portavoces. Poco más de un año duraba la relación de Valls con Ciudadanos, una relación marcada por el distanciamiento del ex primer ministro francés sobre Vox.

Por supuesto, también cabe recordar la salida de Rivera al frente del mando del partido tras el último batacazo electoral en las generales. El 11 de noviembre de 2019 Albert Rivera, que presentaba su dimisión tras la debacle en los resultados al perder 47 escaños en el Congreso y quedarse solo con diez.

Tras esa marcha de Rivera, su "mano derecha", Juan Carlos Girauta, jamás observó a Ciudadanos con los mismos ojos. Finalmente también abandonaría el proyecto de Ciudadanos. El detonante fue el apoyo de Arrimadas a Sánchez para la prórroga del estado de alarma. "No trabajamos tanto para construir una bisagra. Acabo de comunicar formalmente mi baja como afiliado a Ciudadanos", anunciaba el que fue portavoz del partido naranja en el Congreso.

¿En qué situación acabará Ciudadanos tras estas elecciones?

Este escenario que se le viene por delante a la formación de Arrimadas recuerda a lo que les sucedió en el tablero nacional en 2019. Ciudadanos pasó de sus históricos 57 escaños en el Congreso en abril a tan solo 10 en la repetición electoral de noviembre, el peor traspiés de su historia, que provocó la dimisión de su líder, Albert Rivera.

La formación ya era consciente de que, como apuntaba el CIS y otros sondeos, podrían convertirse en una de las formaciones más perjudicadas por una abstención derivada tanto del hastío hacia la política como del miedo al contagio de covid en los colegios electorales. Algo que ha acabado por producirse en las encuestas y también en el resultado final. 6 escaños que les deja en una posición poco favorable en el Parlament. Veremos qué deciden en la reunión de mañana y qué rumbo coge la formación naranja.