Consulta el anecdotario de COPE pulsando aquí y descubre los pueblos más curiosos de España. 

Es una pregunta recurrente. ¿Cuál es el pueblo más antiguo de España? La respuesta la resolvió el Congreso de los Diputados a finales del pasado año, cuando nombró a la localidad palentina de Brañosera. Se le reconoce como el primer tipo de organización de pobladores de España. De hecho, su carta puebla (así se denominaba al documento por el cual los reyes cristianos otorgaban otorgaban una serie de privilegios a grupos poblacionales con el fin de obtener la repoblación de ciertas zonas de interés económico o estratégico durante la Reconquista) data del año 824, la primera concedida en España.

A día de hoy, el municipio apenas cuenta con 240 vecinos, a 1.220 metros de altitud, en la Montaña Palentina. Ser considerado el pueblo más antiguo de la Península, hace que Brañosera cuente con una gran riqueza patrimonial y arquitectónica. La joya de la corona es el románico. Ejemplo de ello es la Iglesia de Santa Eulalia, Pese a ser destruida en el año 1934, aún se conservan restos románicos. Por otro lado, es muy recomendable la visita al Cementerio de la localidad, en el que la lápida de consagración constata su primitiva construcción románica en el año 1118.

Su economía ha dependido en buena medida del  carbón, dada la presencia minera en la zona, aunque actualmente viven del turismo, no solo por su riqueza cultural, sino por su entorno natural. Y es que Brañosera está ubicado en el parque natural de Fuente Cobre, desde donde se pueden disfrutar de unas vistas espectaculares, robles, hayas, jabalíes o buitres, y donde además nace uno de los ríos más famosos de la Península, el Pisuerga (¿les suena eso de “aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid...?).

Cualquier época del año es buena para visitar el pueblo, pero si te interesa conocer sus fiestas, no te pierdas a Brañosera el día de Reyes, cuando tiene lugar el Concejo de Reyes; Las Marcas (último día de febrero), Misa del Consejo (tercer domingo de junio), el día del Torreón (primer domingo de agosto) o San Roque (16 de agosto). Cada nueve años celebran además su fiesta 'La Mojonera', una festividad en la que los vecinos buscan cada mojón que delimita el término municipal para, cuando ya los han encontrado todos, disfrutar de una comida tradicional en la sierra.

Una buena opción es quedarse un fin de semana y visitar las bondades de Brañosera. Dispone de un buen número de alojamientos y atractivos turísticos. Sus restaurantes han adquirido buena fama en toda la comarca, destacando quizá el San Roque, y el Cholo, por sus buenas dotes culinarias.