Casi el 40% de los menores de 25 años está en paro en España, son casi 600.000 según la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre. Lideramos el ranking de la la OCDE seguidos por Grecia, Italia o Suecia, con un 34,2%, un 33,7% y un 27,3% respectivamente.

Estamos lejos de socios europeos como Alemania o Austria con un 6% y un 9% de empleo juvenil respectivamente. ¿Qué hacer para llegar a esos niveles? "Entre lo que sale al mercado y lo que la empresa es capaz de colocar, porque le da utilidad, es desempleo, desempleo juvenil además a largo plazo", nos dice José Canseco, experto en recursos humanos y Socio Director de la consultora de estrategia de personas The Human Touch, quien añade que "formaciones más cortas pero más útiles al corto plazo".

Dicho de otra manera, la clave para los expertos está en que las entidades de formación, tanto público como privadas, fomenten el contacto con las empresas para comprobar qué funciones, qué actividades concretas son las que necesitan más allá de los cargos de alta dirección hacia los que, tradicionalmente, se enfoca la formación universitaria o másteres.

El 90% de los perfiles demandados tienen que ver con la tecnología

"De una u otra manera" nos dice el experto Canseco, "se están demandando perfiles tecnológicos en el 90% de los casos. También se buscan profesionales sanitarios, de logística, del mundo naval, ingenierías y también hay nicho en la formación profesional eléctrica y electrónica y en las energías limpias".

Además, este experto en recursos humanos destaca las grandes dificultades que tienen la empresas en encontrar candidatos en profesiones tradicionales como soldador, tornero, carnicero o pescadero donde quedan puestos vacantes que pueden ser una oportunidad para ingresar en en el mercado laboral.