El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar este martes un plan para ayudar a todas aquellas personas que tengan problemas para pagar el alquiler como consecuencia de la crisis del coronavirus. Tras muchos tira y afloja, hay acuerdo entre las dos caras del Gobierno, entre PSOE y Podemos.

El partido de Iglesias no ha logrado la suspensión de las rentas que pretendía pero sí consigue una distinción expresa entre los pequeños propietarios, que tienen asegurado el cobro íntegro de las rentas, y los grandes tenedores de vivienda, que asumirán un coste. Es una medida sin duda discriminatoria y que veremos cómo se justifica legalmente. 

Salvo sorpresas de última hora estas son las principales medidas, según ha sabido COPE:

1.- El plan incluye una línea de ‘microcréditos’, sin comisiones ni intereses, avalados por el Estado de unos 100 millones de euros para quienes tengan su piso alquilado a particulares o pequeños propietarios. La medida aliviará a los inquilinos y permitirá cobrar a los caseros. Aproximadamente aquí está más del 90% del mercado. Se podrá a acoger a este programa toda persona desempleada, afectada por un ERTE, reducción de jornada o autónomo que no llegue al límite de tres veces el IPREM (incrementado por hijos y personas dependientes a cargo). Esos créditos se podrán devolver en seis años. Si pasado ese tiempo no se han reembolsado, se habilitará un plazo adicional de cuatro años.

2.- Los hogares más vulnerables, es decir aquellos que no puedan afrontar el pago de los microcréditos dispondrán de ayudas directas del Estado para saldar su deuda con el ICO. La cuantía de la ayuda podrá llegar hasta un importe máximo de 900 euros al mes y hasta el 100% del principal, e intereses del préstamo suscrito, y de 200 euros al mes para atender los gastos de mantenimiento, comunidad y suministros básicos con el límite del 100% de los mismos.

3.- Si el piso alquilado es propiedad de grandes tenedores de vivienda o de un fondo de inversión, se establece una moratoria en el pago de la renta que se aplicará de manera automática durante un periodo de hasta cuatro meses. Estos inquilinos se beneficiarán o bien de una quita de la deuda del 50% o de una reestructuración de dicha deuda en dos o tres años, pudiendo acogerse siempre a las líneas de crédito del ICO.

4.- Se suspenden los desahucios durante los seis meses siguientes al fin del estado de alarma.

5.- Habrá una prorroga automática de todos los contratos de alquiler cuyo vencimiento se produzca durante el periodo de estado de alarma, que se declaró el pasado 14 de marzo y tiene una duración provisional hasta el próximo 11 de abril. El plan movilizará unos recursos de unos 700 millones de euros.