Alberto Sánchez, abogado inmobiliario: "Si fallece tu casero sus herederos pueden rescindirte el contrato de alquiler si es de larga duración"

El fallecimiento del propietario de una vivienda alquilada es una de las mayores incertidumbres para los inquilinos. Ante esta situación, el abogado inmobiliario Alberto Sánchez ha explicado qué sucede con el contrato de arrendamiento. El experto aclara que, en principio, los herederos deben respetar el acuerdo, pero existen circunstancias que les permitirían rescindirlo.

Derechos de los herederos

Tras el fallecimiento del casero, sus herederos se subrogan en ese contrato, es decir, "es como si lo hubieran firmado ellos y, por lo tanto, tienen que respetarlo", señala Sánchez. Sin embargo, esta subrogación no es una garantía absoluta de continuidad para el inquilino. El abogado advierte de que la situación puede cambiar, ya que "esos herederos pueden usar los derechos que les otorga la ley o los que les otorgue el propio contrato".

Esos herederos pueden usar los derechos que les otorga la ley o los que les otorgue el propio contrato"

Una de las vías que la ley contempla es la posibilidad de recuperar la vivienda para uso personal bajo ciertas condiciones. Otra opción para finalizar el arrendamiento se presenta si el contrato lleva muchos años en vigor. No obstante, Alberto Sánchez insiste en que no hay una respuesta única, ya que todo depende de las circunstancias específicas y de la redacción del documento. Por ello, concluye que "habría que ver cada caso concreto".

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Un mercado del alquiler tensionado

La preocupación por la continuidad del alquiler se enmarca en un contexto donde la demanda supera a la oferta. Representantes del sector inmobiliario han alertado de que España necesitará más de tres millones de viviendas de alquiler en los próximos quince años, una cifra que evidencia la presión sobre el mercado actual.

Durante la jornada Rental Housing Forum, los expertos han señalado que la producción de vivienda protegida tendría que multiplicarse por diez para satisfacer la demanda. Alcanzar este objetivo supondría una inversión estimada de 540.000 millones de euros, según ha apuntado Amalia López, directora de Inversión de Azora, quien augura que esta brecha "va a seguir creciendo".

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Este crecimiento choca con una drástica contracción de la oferta, ya que la producción de vivienda ha caído un 83 % desde 2006, situándose por debajo de las 100.000 unidades anuales. En este escenario, López ha subrayado la importancia de "convencer a los fondos para que venga capital a desarrollar este parque de viviendas", que actualmente está en manos de un 95 % de pequeños propietarios.

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Riesgo de crisis habitacional

El consejero delegado de Cevasa, Donato Muñoz, considera que la producción de vivienda asequible debería multiplicarse por diez y ha lamentado que los alquileres protegidos "son excesivamente caros por la sobrecarga de impuestos", una situación que, a su juicio, la "acaba pagando la población". Muñoz ha advertido de que si no se toman medidas para abaratar el alquiler, "vamos a tener un problema social".

El esfuerzo económico que supone el alquiler es una muestra de la tensión del mercado. Un estudio de Idealista revela que acceder a una vivienda media en alquiler requiere el 36 % de los ingresos netos de una familia, muy por encima del umbral recomendado por los expertos y del 25 % necesario para la compra.

Las previsiones de Fotocasa apuntan a que el precio de la vivienda podría cerrar 2025 con una subida del 15 % y el del alquiler registrar máximos históricos con 14 euros/m². El ritmo de subidas, según el portal, "recuerda a los años en los que los precios empezaron a acelerarse antes de la burbuja de 2007".

España abrirá la puerta a una crisis habitacional sin precedentes"

De cara a 2026, las perspectivas dependen de que se corrijan los desequilibrios estructurales. La directora de Estudios de Fotocasa, María Matos, avisa de que, si no se amplía el parque de vivienda, "España abrirá la puerta a una crisis habitacional sin precedentes".