El Centro Militar de Farmacia de la Defensa ubicado en Colmenar Viejo es uno de los organismos públicos que está en primera línea ayudando a frenar la propagación del coronavirus con la fabricación de productos y medicamentos que limitan su propagación. Para que no interrumpa esa labor, el Ministerio de Defensa ha reforzado su plantilla, de la que normalmente forman parte 100 personas, “prácticamente en un 50 por ciento”, según ha contado a COPE el coronel Antonio Juberías Sánchez, director de esta institución. “El modelo de trabajo -ante el tipo de crisis en la que nos encontramos- tiene que ser un poco especial; tenemos que evitar en lo posible contagios en el centro de trabajo para impedir que esos procesos, esa actividad se vea mermada, y de ahí estos refuerzos”, asegura el coronel. Dice que “el 87 por ciento es personal civil, algunos de carácter facultativo, otros técnicos superiores, personal que lleva a cabo procesos de fabricación, control de calidad”, y que se han organizado por turnos para esquivar los contagios, aunque “muchos de ellos pueden llevar a cabo teletrabajo para lo que es la fase de documentación, control y todo lo que no son cuestiones meramente manuales”.

El coronel Juberías explica que ahora están “centrados en la producción de gel desinfectante, de un producto de nuestro catálogo que es un antipirético, y tenemos otras líneas preparadas para llevar a cabo la fabricación de los productos que nos indiquen, ya formen parte de nuestro catálogo o no”. Recuerda que el 15 de marzo la ministra de Defensa, Margarita Robles ordenó que llevaran a cabo “la implementación de los elementos necesarios para incrementar la capacidad de producción de gel antiséptico, y aquellos medicamentos y aquellos productos que fueran necesarios para atender a esta situación a esta crisis”.

El director del Centro Militar de Farmacia de la Defensa asegura que “en estos momentos es complicado hablar de una capacidad de producción exacta, no me aventuraría a dar ningún tipo de cifra porque puede ser inexacta en estas circunstancia”. Y aclara que no son ellos quienes deciden "a donde se envían los medicamentos porque esos productos los ponemos a disposición de las autoridades, y ellas son las que determinan donde tienen que ser distribuidos”.

 El Centro Militar de Farmacia de la Defensa de Colmenar Viejo está integrado en la red sanitaria militar y tiene como función llevar a cabo la gestión de todo el recurso sanitario, en los aspectos de fabricación y logística. Afirma el coronel Juberías que trabajan con un catálogo que comprende los medicamentos necesarios para atender a los miembros de las Fuerzas Armadas, “en el 65 por ciento casos son terapias para apoyo y tratamiento a bajas NBQR”, y añade que su “campo de especialización es ése, aquellos productos, aquellos medicamentos que son necesarios para una situación un tanto especial que pueden vivir las Fuerzas Armadas como es el trabajo en ambiente nuclear, biológico o químico”. Es el centro de referencia para la fabricación de antídotos y son “custodios del almacén estratégico nacional”, en el que están depositados medicamentos “estratégicos”. “Su contenido no se lo puedo comentar”, ha respondido el coronel a COPE. Además, realizan tareas de investigación “básicamente encaminadas a lo que es nuestra función, que es preservar la salud de los miembros de las Fuerzas Armadas”.