'La memoria de la nieve', segundo trabajo de Alejandro Pelayo
El compositor, pianista y productor integrante de Marlango lanza un nuevo disco en solitario en el que colabora con Suso Sáiz y Marta Mulero, entre otros
COPE.es
Tiempo de lectura: 2'Actualizado 23:41
'La memoria de la nieve' ha sido el nombre escogido para el nuevo álbum del compositor, pianista y productor Alejandro Pelayo, que lanza su segundo disco de estudio en solitario el próximo viernes 25 de octubre. El concierto de presentación tendrá lugar en el Café Berlín de Madrid el próximo 7 de noviembre a las 21 horas (ya están las entradas disponibles). En este trabajo cuenta con las colaboraciones de otros artistas como Suso Sáiz, Vicent Huma, Pablo Pulido y Marta Mulero al violonchelo. No solamente estará disponible en formato físico y en todas las plataformas digitales, sino que también tendrá su edición en vinilo.
Conocido por su trabajo al frente del grupo Marlango con la actriz Leonor Watling, ha vuelto a sorprender con un nuevo disco después de la publicación de su primer álbum 'La herida invisible' en el año 2017. Un disco en el que, además del piano, también tendrá un especial protagonismo el violonchelo de la mano de Marta Mulero.
Así de emocionado se ha mostrado el artista de que por fin pueda ver la luz este disco: “Es mi segundo trabajo en solitario después de "La Herida Invisible" y estoy muy feliz, bastante nervioso y muy ilusionado. Esta vez el piano comparte con el violonchelo de Marta Mulero ese lugar donde habitualmente conviven armonía y melodía. Marta se lanzó sin dudar, sin red ni partituras y desde su propia vivencia aporta dulzura, dolor y belleza”.
“Colaboran además Suso Sáiz, Pablo Pulido y Vicent Huma que lo han hecho crecer desde lugares muy personales y desde su inmenso talento. No me cansaré nunca de agradecerles su generosidad. En otro momento hablaremos de las maravillosas fotografías del maestro Jesús Cornejo, que nunca antes había visto nevar...”, ha concluido.
Así describe él mismo su segundo álbum, una mezcla de sentimientos que no dejará a nadie indiferente. “Es la banda sonora de ese instante mágico del invierno cuando empieza a nevar por primera vez y se oye el crepitar de los copos y el frío congela el aliento pero también una metáfora sobre el Alzheimer y lo efímero de los recuerdos. Es un disco minimalista de piano y violonchelo sobre la pérdida y las despedidas”.
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