SANTO 13 FEBRERO

Santa Engracia de Mérida, mártir por ser fiel al amor de Dios

Hoy seguimos la vida de Santa Engracia de Mérida, cuya vida trancurre en el siglo XI en los límites de Portugal y España.

Jesús Luis Sacristán García

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La geografía española está repleta de Santos. Por cada rincón, por cada esquina y por cada punto de la Península y de las Islas, rebosa la fe que nos vino del Apóstol Santiago y los discípulos que le siguieron. Hoy la Iglesia nos presenta a Santa Engracia de Mérida. Nacida en Portugal, cuando pertenecía a la Península Ibérica, su vida transcurre en el siglo XI.

Su linaje seguramente fue de familia de ascendencia noble. Y siempre se regían por las normas de entonces. Precisamente por eso, siguiendo las costumbres de la época el padre quería desposarla pero ella quería continuar con el camino de la consagración a Dios, que es el que había tomado anteriormente y del que no quería apartarse. 

Entonces Engracia se marcha de su casa y huye seguramente hacia los Montes Carbajales situados en la zona de Zamora. Alguien informa al pretendiente de que ha huído y este, al sentirse despreciado, sale en su persecución. El captor le persigue hasta llegar a ese lugar. Y da con Engracia, con quien el padre le había dado palabra de que sería su esposa. Una vez que le encuentra, en un rapto de furia por rechazarle, y sin darle ningua opcióna defenderse, le decapita. Como había arrojado su cabeza al río, posteriormente un pastor la descubrió.

La historia cuenta que en el rio notó como un resplandor y entendió que era una señal divina que indicaba algo. Una vez que la tuvo, construyeron, en honor de ella, una Ermita. Pero no siempre seguiría allí, porque con el paso de los tiempos se pensó que era un lugar muy pequeño para tan gran Santa. Por eso, finalmente las reliquias de Santa Engracia se llevaron a la Catedral de Badajoz, para que recibiesen el culto debido.

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