Fallece el sacerdote Rubén Pérez víctima de la explosión en el edificio de la parroquia Virgen de la Paloma

Se convierte en la cuarta víctima mortal de la explosión de gas. El religioso tuvo que ser intervenido de urgencia en el hospital 'La Paz'

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La Archidiócesis de Madrid ha confirmado la muerte del Padre Rubén Pérez, el sacerdote que se encontraba junto al electricista David Santos revisando la caldera de su habitación que podría haber provocado la explosión de gas en la madrileña calle Toledo a las tres de la tarde de este miércoles, 20 de enero. De esta manera, Rubén se convierte en la cuarta víctima mortal de la tragedia ocurrida en el edificio propiedad de la parroquia Virgen de la Paloma.



El sacerdote tuvo que ser trasladado al hospital de 'La Paz' en estado grave como consecuencia de las heridas que había sufrido tras la explosión. Tras su llegada al centro hospitalario, tuvo que ser intervenido de urgencia esta misma noche, pero al no poder superar la intervención ha fallecido en la UVI pocos minutos antes de las tres de la madrugada.

El religioso tenía 35 años de edad. Según ha precisado la Archidiócesis de Madrid, fue su hermano quien le administró la unción su hermano Pablo, también sacerdote diocesano. Rubén era sacerdote desde el pasado mes de junio, cuando fue ordenado por el Arzobispo de Madrid, el cardenal Carlos Osoro, en la catedral de la Almudena junto a otros veinte compañeros tras formarse en el seminario Redemptoris Mater de la capital de España.

La parroquia de Virgen de la Paloma fue su primer destino como sacerdote. En su primera Misa, tal y como recuerda la Archidiócesis en su página web, invitó a los fieles "a mirar al Señor, a confiar en Él", y que "cuando vengan las dificultades, gritemos al Señor". "Experimentarás que el Señor es tu tranquilidad. Que podamos experimentar la alegría de que el Señor está con nosotros", aseveró.

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