Carranque vive su fin de semana más negro tras el incendio de su parroquia: "No podremos entrar en meses"

El párroco de Santa María Magdalena ha descartado en Aleluya que se trate de un acto vandálico. Las principales imágenes del templo toledano han quedado reducidas a cenizas

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Los 5.600 vecinos de la localidad toledana de Carranque han vivido un fin de semana negro, después de que en la madrugada del sábado ardiera la parroquia de Santa María Magdalena. El fuego provocó importantes daños en el interior del templo, como la reducción a cenizas del Cristo de la Fe y la Virgen de la Piedad, así como el estandarte que el alcalde del municipio perteneciente a la comarca de La Sagra había donado a su Cristo el pasado jueves, día de la ofrenda.

48 horas después del suceso toca evaluar los daños y determinar las causas. En declaraciones a Aleluya, el párroco de la iglesia, el Padre Josué García Martínez, ha indicado que a estas horas aún se desconoce qué provocó las llamas. Se cree que pudo deberse a un fallo eléctrico o a las velas que estaban encendidas en su interior. Lo que se descarta es que se tratase de un acto vandálico: “Las causas están a manos de los peritos, pero ha podido ser accidental”, explica.



En torno a las tres de la madrugada del sábado fue cuando el sacerdote recibió el aviso de la central de alarmas: “Vieron que había un sensor de movimientos que había saltado, y me llamaron. Fueron ellos quienes dieron aviso a los bomberos”, precisa el religioso, quien ha detallado que el incendio se originó en una esquina de la parroquia.

A la espera de un informe, queda aún por determinar el alcance de los daños y los costes que supondrán su reparación. Lo que sí está claro, es que los fieles no podrán acudir a la parroquia de Santa María Magdalena durante varios meses: “Mientras tanto disponemos de la capilla del cementerio y el Ayuntamiento de Carranque nos ha cedido el auditorio para días más grandes, como los domingos. Esto va para meses”, ha precisado el Padre Josué.

La única buena noticia es que la estructura del edificio no ha sufrido daños importantes, si bien sus imágenes más representativas o elementos de la liturgia no han corrido la misma suerte. A los ya citados Cristo de la Fe y la Virgen de la Piedad, resultaron dañados por el fuego el retablo con una talla de la Virgen del Rosario, la figura del Santo Sepulcro que data del siglo XVIII, los cristales de la urna, bancos…

Preguntado al párroco de la iglesia si se impulsarán colectas entre los vecinos y feligreses para contribuir a reponer las imágenes, asegura que se está trabajando en esa posibilidad, aunque se está a la espera de lo que dictamine el seguro: “La diócesis ha mandado ya a sus técnicos”.

Las imágenes que se han salvado se guardan en el garaje del Ayuntamiento para su limpieza, mientras que los bancos que no se han quemado están depositados en el polideportivo municipal.

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