El Papa Francisco elige para París al arzobispo Laurent Ullrich, nombramiento considerado de transición

Se cumplieron las previsiones que pronosticaban el nombramiento para París para poco después de Semana Santa. Y en la mañana de hoy martes, 26 de abril, el Papa Francisco ha elegido para pastorear la sede capitalina a Laurent Ulrich, hasta ahora arzobispo metropolitano de Lille.

Monseñor Ulrich, informa la Santa Sede, nació el 7 de septiembre de 1951 en Dijon, archidiócesis del mismo nombre. Estudió en el Seminario Universitario de Saint-Irénée y se licenció en Teología en la Universidad Católica de Lyon, siendo ordenado sacerdote el 2 de diciembre de 1979.

Al episcopado llegó en junio de 2000, cuando san Juan Pablo II lo nombró arzobispo de Chambéry y obispo de Saint-Jean-de-Maurienne et Tarentaise. El 1 de febrero de 2008, ya con Benedicto XVI en la cátedra de Pedro, fue designado arzobispo-obispo de Lille, convirtiéndose en su arzobispo metropolitano el 29 de marzo, cuando esa sede fue elevada a metropolitana. Ahora, tras catorce años, da el salto a la capital.

En la Conferencia Episcopal Francesa preside el Consejo de Educación Católica.

No entraba en las quinielas

El nombre de Ulrich no figuraba en las quinielas para suceder a monseñor Aupetit, tras la renuncia de este en diciembre de 2021 tras desvelar la prensa que había mantenido una relación sentimental con una mujer. Los medios de comunicación señalaban que el mejor colocado para el puesto eran el arzobispo de Marsella, Jean-Marc Aveline, situando en la recámara al obispo de Ajaccio, el francisano François-Xabier Bustillo, de origen navarro, y al jesuita bretón François Boëdec, responsable de la nueva provincia de Europa Oriental francófona.

Quienes mejor conocen al nuevo arzobispo de París lo definen como una persona de diálogo y con experiencia en asuntos de gestión. Su perfil es el de un prelado progresista y muy sensible a los asuntos relacionados con la migración. El nombramiento, en cualquier caso, ha sido interpretado como de transición, pues en septiembre cumple ya 71 años, por lo que en 2026 deberá presentar ya la renuncia al Santo Padre.

Ello no le impedirá presidir los fastos de la reapertura de la catedral de Nôtre Dame, después de los laboriosos trabajos de restauración tras el devastador incendio que la primera seo de Francia sufrió en abril de 2019.

La archidiócesis de París es la mayor de Francia: cuenta con 106 parroquias y unos 500 sacerdotes. Desde la aceptación de la renuncia de Aupetit ha estado gobernada como administrador apostólico por el arzobispo emérito de Marsella, Georges Pontier.