Una pancarta, el apellido de la abuela del Papa y el emocionante encuentro de los Vassallo con Francisco

Una pancarta improvisada en papel de regalo fue el detonante de todo. La familia Vassallo comparte apellido con la abuela del Papa Francisco, Rosa Vassallo y ese privilegio les ha llevado a conocer en persona al Santo Padre.

Paloma y Carlos son hermanos. Han acudido al programa ‘Ecclesia’ junto a Belén y Macarena, para explicar todos los detalles de este encuentro fortuito. “Nosotros siempre pensábamos que podríamos tener alguna relación de parentesco con el Papa”, ha explicado Paloma Vassallo.

La familia fue a Roma para una audiencia general en la Plaza de San Pedro. “Estábamos entre las 5.000 personas sabiendo que compartíamos el apellido, sin ninguna intención más”. De repente, se les ocurrió una idea: “Intentamos llamar la atención del Santo padre desde lejos”. Para ello, escribieron su apellido en una pancarta: “Fue muy improvisada, hecha con lo primero que pillamos. Compramos un papel de regalo en una papelería de Roma y escribimos con un rotulador”, ha contado Paloma en TRECE. La familia Vassallo no se imaginaba lo que estaba a punto de ocurrir. El Papa les vio: “Nos vinieron a buscar de seguridad porque el Papa nos saludaba y nos señalaba. Nos dijeron que nos quería recibir en persona”. Así lo ha recordado Carlos Vassallo a Álvaro de Juana. Un encuentro que recuerdan con mucha emoción. “Llegamos hasta él con la pancarta y con una imagen de una Virgen que le regalamos”. El Papa fue muy cercano con ellos, “Nos dijo, ¡no estéis tan serios! Fue muy cariñoso”, ha explicado Carlos.

Pero además de la alegría propia del encuentro, los Vassallo hicieron una obra de caridad ayudando a una madre a conseguir las oraciones del Papa para su hijo enfermo. La mujer, al ver que la familia iba a saludar al Papa en persona, les preguntó si sería posible que le hicieran llegar a Francisco una fotografía de su hijo Jaime que tiene Síndrome de Down y una anomalía en el corazón. “Así que le entregamos al Papa su foto, para que rezara por Jaime, que tenía que enfrentarse a una operación”, ha contado Paloma.

La familia Vassallo cumplió su misión y se quedó con ganas de hablar con la madre del niño. Providencialmente, al día siguiente a la Audiencia General, antes de volver a España, se volvieron a encontrar en la basílica de Santa María la Mayor, y ahí pudieron contarle todos los detalles de la entrega que le hicieron al Santo Padre. Desde entonces tienen contacto la familia de Jaime. “Son abulenses y nos hemos hecho amigos”, ha dicho Carlos. Un bonito recuerdo que la familia Vassallo tendrá para siempre.