Rodríguez Carballo ya es arzobispo coadjutor de Mérida-Badajoz: "Me desgastaré por mis ovejas"

El prelado ha asegurado en su toma de posesión que frente a los desafíos "sueña con una Iglesia tienda, una tienda alargada a derecha e izquierda"

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"Sea mi primera palabra gracias, porque apenas acabo de llegar y ya me siento en casa". Con este agradecimiento ha comenzado su aloción José Rodríguez Carballo, que este 25 de noviembre ha tomado posesión como arzobispo coadjutor de Mérida-Badajoz. La celebración ha comenzado con una procesión de entrada con la asistencia del nuncio en España, Bernardito Auza; 5 cardenales; 10 arzobispos; 20 obispos y numerosos presbíteros, entre ellos más de un centenar de nuestra diócesis.
Además, ha contado con una numerosa representación de la familia franciscana —recordamos que Carballo ha sido ministro general de esta Orden durante 10 años—, así como miembros del Dicasterio para la Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, del que ha sido secretario hasta su nombramiento como arzobispo coadjutor. Cabe destacar, la presencia de la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, y el vicepresidente del Senado y expresidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.
"Gracias a tantas personas que he encontrado en la va y que me sostuvieron, y me sostienen todavia hoy con su cercania y su oración. Gracias al Santo Padre el Pasa Francisco por haber sido para mi un padre, hermano y amigo", proseguía visiblemente emocionado el nuevo arzobispo.


Despues de mas de 10 años colaborando con el Santo Padre Francisco en el Vaticano, "acojo esta nueva misión no sin temor, pero con confianza en aquel es quien como reza mi lema episcopal «Se de quien me he fiado». Como ya os dije en mi primer mensaje no os conozco como quisiera y ya os amo. Puedo decir que me siento extremeño y que mi compromiso desde ahora mismo será conoceros más y mejor para amaros más y mejor, acogeras en mi casa, en mi corazón, para sentirme cada vez más a gusto entre vosotros".



Desgastarme por mis ovejas

"Como pastor tengo bien claro que mi misión es la de salir al encuentro de las ovejas dispersas. A las ovejas de cerca, las "robustas y fuertes" para apacentarlas debidamente; a las de lejos, a ejemplo del Buen Pastor que deja las 99 ovejas en el redil y va en busca de la oveja perdida, he de salir en su busqueda y, si fuera necesario, vendar a las heridas, y curar a las enfermas con el aceite de la bondad y de la misericordia. Tengo claro que como pastor estoy llamado a gastarme y desgastarme, a tiempo y a destiempo, por el rebaño que el Señor me ha confiado". "Sueño con una iglesia propositiva, que se abra a una pastoral nueva en su ardor, nueva en sus êtodos y nueva en sus expresiones.Y desde esos postulados priorice la pastoral familiar, sabiendo que la familia es el primer lugar donde se aprende a amar, se frecuenta escuela del perdón y el lugar más importante para transmitir la fe: y al mismo tiempo entre en na cultura que nos permita vivir la propia vida en clave vocacional: en la vida matrimonial, de special consagración, vida consagrada, y presbiteral".

"Sueño una Iglesia diocesana cuyo nombre sea sinodo, con una Iglesia samaritana que cure las heridas de tantos que yacen medio muertos a la del camino, comprometida con el mundo del sufrimiento,. Muchos son los desafíos que lanza la cultura actual. Por ello os pido que trabajemos con los ojos puestos en el Señor, mano con mano, codo con cado", ha concluido.



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