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El arzobispo de Sevilla marca la "hoja de ruta" para los próximos cinco años: "Rememos mar adentro, sin miedo"

José Ángel Saiz Meneses presentó el nuevo plan pastoral diocesano que fomentará "la caridad y la acción social, la liturgia y los sacramentos, la evangelización y la comunión"

Por Redacción Religión

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"La acción pastoral no la inventamos nosotros, ni es fruto de nuestra creatividad o ingenio. Es la actualización que la Iglesia realiza de la acción salvadora de Jesucristo”. Así presentó este 27 de noviembre el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses el nuevo plan pastoral diocesano para la Iglesia sevillana durante los próximos cinco años.

La catedral de Sevilla acogió en este primer domingo del tiempo de adviento la presentación del texto Duc in Altum, “un momento de encuentro, comunión y unidad” que comenzó con la celebración de una eucaristía en el altar del Jubileo, presidida y predicada por el arzobispo, acompañado por el arzobispo emérito, Juan José Asenjo, y arropado por representantes de toda la Iglesia sevillana, tanto en su dimensión territorial (parroquias y arciprestazgos), como en la sectorial (vicarías y delegaciones). Este documento marcará el rumbo de la diócesis durante los próximos cinco años, señalando las principales líneas de actuación y los areópagos en los que el arzobispo hispalense quiere poner el acento durante los primeros años de su pontificado.

Cuatro partes para la evangelización

El texto se divide en cuatro partes tituladas ‘Discípulos misioneros llamados a la santidad’, ‘Una Casa con las puertas abiertas’, ‘Una familia en salida’ y ‘El gusto de ser pueblo’. Cada una se centra en un aspecto concreto de la vida de la Iglesia que potenciar a lo largo del próximo lustro. Entre ellos destaca la caridad y la acción social, la liturgia y los sacramentos, la evangelización, la catequesis y el fomento de la comunión entre los distintos grupos y carismas presentes en nuestra Iglesia local.

El prelado manifestó que "la aplicación del Plan necesita que hagamos un camino unidos, en familia, en comunicad, en iglesia, en comunión y en sinodalidad, como nos insiste tanto el Papa Francisco". Una vez más estuvo presente en sus discurso la figura de María Santísima, en la advocación de la Virgen de los Reyes, "que tiene un papel muy importante, que es la madre que nos guía, que también nos lleva de la mano y nos conduce hasta el puerto seguro, que es Cristo".

"Dios hace nuevas todas las cosas"

Tras unos años muy condicionados por la pandemia, el arzobispo de Sevilla confía en una "total normalización de la actividad pastoral" para el próximo lustro. "La pandemia nos ha dejado un presente y un futuro llenos de desafíos nuevos, aunque sabemos que la verdadera novedad surge del amor de Dios, que hace nuevas todas las cosas. Cristo hace nuevas todas las cosas en virtud del misterio pascual". El prelado invita a toda la Archidiócesis "a reavivar el carisma que hemos recibido de Dios" así como "a entregarnos a la misión evangelizadora con esperanza renovada".

El arzobispo agradeció "la colaboración de todas las personas que han trabajado en la elaboración de este Plan Pastoral, especialmente la comisión redactora" y ha llamado a todo el pueblo cristiano "a remar mar adentro sin miedo, poniendo la confianza en la Palabra de Cristo resucitado, presente en su Iglesia, con la fuerza del Espíritu Santo".

Ser más fieles a Jesús

Por ello, ha invitado a toda la Iglesia diocesana a “trabajar generosamente, todos juntos, sabedores de que el principal agente evangelizador es el Espíritu Santo. A la vez, este trabajo conjunto nos ayuda a buscar la voluntad de Dios, a crecer en comunión y sinodalidad. Este Plan Pastoral debe servir para que nuestra Iglesia de Sevilla sea más fiel a Jesús, llevando a cabo su misión propia y específica de la mejor manera posible y sirviéndose de todos los medios de que dispone”.

Esta tarea, ha señalado, “implica diversas funciones, denominadas acciones pastorales o acciones eclesiales, es decir, ministerios de la Iglesia en distintos ámbitos de realización. Los ministerios proféticos, litúrgicos y hodegético”. Precisamente, explicaba, el Plan Pastoral ha recogido esta distribución “añadiendo un cuarto aspecto o dimensión: la comunión y coordinación diocesana, la corresponsabilidad y la sinodalidad, el recorrer juntos el camino”.



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