¿Qué dulces elaboran las monjas durante el verano?: "Tienen de muchos sabores, hasta de pitahaya"

9 de agosto, más de 40 grados en varias capitales y la mayor parte del país en alerta naranja y roja. En días como hoy lo que apetece es algo fresco, como un helado. En Gandía (Valencia) son varios los turistas que han conocido a unas clarisas que fabrican desde el verano pasado helados de varios sabores: limón, naranja, fresa, almendra, avellana, chocolate, tarta de queso, oreo y café, yogur... y aún están probando con algunos nuevos, como el de pitahaya, también llamada “la fruta del dragón”, que viene de América y se consume mucho en Perú y México.

Estas monjas siempre se habían dedicado, como es tradicional, a la elaboración de dulces navideños. Con lo que ingresan los monasterios y los conventos consiguen mantener sus gastos gran parte del año. Ahora, con la venta de helados, consiguen algún ingreso extra que palía el descenso de donativos que vienen consiguiendo. Una de las 9 las clarisas que viven en el monasterio de Gandía, sor Isabel, ha contado en 'Mediodía COPE' que comenzaron a preparar estos postres el año pasado, pero, como era la primera vez que los hacían, no les dio tiempo a venderlos hasta agosto. Este año, sin embargo, han podido adelantar un poco ese lanzamiento, a julio.

Las clarisas de Mallorca fueron las pioneras

En 'Mediodía COPE' hemos hablado con sor Sebastiana, una clarisa de Mallorca. Ellas fueron las que enseñaron a sus hermanas a elaborar este tipo de producto. "En verano la venta de los dulces cae un poco y hay mucho turismo. Hay un pastelero que nos vino a ayudar a hacer los helados, fuimos probando… y hasta hoy. Aquí hay bastante venta pero es que estamos en una zona muy turística y es normal que vendamos muchos helados. Y más en verano", ha dicho sor Sebastiana, la encargada del obrador en Palma. Ella se refiere a Eloy Galdeano, profesor de hostelería en Cantabria.