El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, ha anunciado hoy una rebaja del IRPF para las rentas inferiores a 60.000 euros y también aumenta en un 10% todas las deducciones autonómicas. Más allá de la buena noticia que supone para los valencianos hay una lectura nacional. La “novedad” es que es una comunidad gobernada por el PSOE.

Esto no tendría por qué ser noticia pero en el contexto de la guerra abierta por bajar impuestos, la iniciativa la llevaban las comunidades gobernadas por el Partido Popular, con Madrid y Andalucía a la cabeza, seguidas de Galicia, Castilla y León o Murcia. El hecho de que sea un gobierno socialista el que ahora anuncie una rebaja fiscal no parece casualidad sino más bien una reacción a los anuncios del PP.

Lo que acaba de hacer el presidente de Valencia cambia el paso en la politica marcada desde el Gobierno. La semana pasada el propio ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, reaccionaba a las rebajas fiscales del PP planteando retomar algunos impuestos que estaban en manos de las autonomías y mira por donde, es ahora una comunidad socialista la que anuncia una rebaja. Y es que es muy dificil explicar a los ciudadanos que tú no vas bajar impuestos mientras el vecino de otra región si lo hace y eso supone a los ciudadanos pagar menos.

Ahora bien, dentro de toda esta guerra, el impuesto estrella es el de patrimonio. Es obligatorio y lo tienen todas las regiones. No se puede eliminar pero sí que se puede bonificar y lo pagan muy pocos ciudadanos, con rentas muy altas.

En Madrid y Andalucía se bonifica entero, es decir sale gratis y en Galicia, acaban de anunciar la bonificación del 50%, es decir, se pagará la mitad. La teoría dice que así se retiene a los grandes capitales para que abonen otros impuestos y al final se recaude más.

Patrimonio es la línea roja que no pueden tocar las comunidades del PSOE. De hecho, hoy, Ximo Puig no ha mencionado ningún cambio porque eso si que hubiera hecho saltar todos los tornillos en Moncloa.

Y es que este impuesto se presta a la demagogia. El Gobierno dice que si se bonifica, como hace el PP, se beneficia a quien más tiene. Por eso está diseñando ese “impuesto a los ricos” como quiere Podemos, al estilo Robin Hood. Un impuesto que no aceptó en su momento el PSOE pero que ahora SI le viene bien...cuando cada vez más comunidades están bonificando el impuesto de Patrimonio.

Es un Robin Hood de saldo porque el objetivo es seguir recaudando y, por eso, ya están preparando una nueva batería de impuestos que conoceremos en unos días.