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Ayer recordábamos esa pieza de oratoria que fue el discurso de la moción de censura de Pedro Sánchez hace dos años. En aquel discurso, Sánchez se comprometía a dar prestigio y estabilidad a las instituciones. Dar pestrigio a las instituciones y estabilidad, en definitiva.

Hemos entendido dos años después que la estabilidad es que Sánchez sigue en Moncloa. El presidente del Gobierno puede pactar una cosa con unos socios y a la mañana siguiente lo contrario. Pero Sánchez no percibe ni contradicción ni inestabilidad, porque la estabilidad es él.

Pongamos como ejemplo lo que ha sucedido esta mañana Ciudadanos ha anunciado su apoyo a la sexta prórroga del estado de alarma. Han sido segundo plato. Sánchez no ha querido que le pasara como hace quince días que tuviese que pactar con Bildu.

El primer compromiso, algo exigido ayer por Edmundo Bal tras el Comité Permanente de los liberales, es que la desescalada se aborde de forma idéntica en toda España sin perjuicio de la progresión sanitaria de cada territorio. El acuerdo del Gobierno con Ciudadanos incluye un plan para el sector turístico con 2.500 millones de euros en avales.

Esto que ha firmado Sánchez con Ciudadanos está en contradicción con lo que acordó con el PNV y le ha faltado tiempo a Ortuzar para pedirle explicaciones al Gobierno.

Lo que acordaba el PNV y Esquerra es que a partir de la tercera fase eran las autonomías las que gestionaban. Siempre, esta pretensión del independentismo de la asemetría. Ciudadanos ha firmado lo contrario. En Sánchez no hay principio de contradicción porque todo es coherente si le beneficia a él.

Es evidente que para Ciudadanos es muy contradictorio estar en el mismo grupo de socios que promueven la independencia. Bal, intentando justificar esta diferencia insalvable... ha dicho que se trata de salvar vidas y empleos. Podría ser una cierta justificación pero coloca a Ciudadanos en una posición complicada. ¿Puede Ciudadanos pactar unos presupuestos con ERC e Iglesias?

Fernando de Haro sobre el cese de Pérez de los Cobos y la propuesta de presidencia de la CNMC

También en el discurso de la moción de censura decía Sánchez que iba a promover el prestigio de las instituciones. Grande-Marlaska negó que el cese del coronel de la Guardia Civil fuese motivado porque se negase a entregarle el informe sobre la manifestación del 8 de marzo.

Fernando Grande Marlaska, ministro del Interior, ha negado este martes que el cese del coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, hasta el domingo jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid, esté relacionado con su vinculación con el informe sobre la manifestación feminista del 8-M.

Lo que hemos sabido en las últimas horas es que una nota secreta revela que Marlaska cesó a De los Cobos por no filtrarle investigaciones. Esto es lo que llama Sánchez llama prestigio de las instituciones, que a un coronel de la Guardia Civil se le cese.

Sánchez confunde, por utilizar su terminología, las instituciones con su persona. Pedro Sánchez hace dos años nombró a su jefe de Gabinete Juan Manuel Serrano, máximo responsable de Correos. Iglesias ha colocado a su ex asesor Cristobal Gallego, en el consejo de Enagas. Donde también entran los socialistas Montilla y José Blanco. Y hoy Sánchez en el Consejo de Ministros... el Gobierno ha tomado el control de la CNMC y da entrada vocales de Podemos y de ERC. La presidenta va a ser Cani Fernández que era asesora de Redondo. Sánchez seguirá diciendo que esto no es desprestigio de las instituciones porque la institución es él