Llevamos casi tres años de pandemia y las mascarillas siguen siendo obligatorias en determinados ámbitos como en el transporte público, en los centros sanitarios, en los hospitales o las farmacias.

España es uno de los pocos países europeos junto Alemania o Grecia que mantiene la obligatoriedad de la mascarilla en el transporte público.

Los asesores del ministerio de Sanidad acordaron no eliminar su uso obligatorio hasta que se vieran los efectos de la apertura de fronteras en China, plazo que expira esta próxima semana. Por lo pronto, desde el ministerio de Sanidad defienden que se retirarán pronto si se mantiene la estabilidad en los datos de contagios. Y las cifras, a pesar de la apertura de fronteras con China, siguen estables. De hecho, solo ha habido dos positivos en los más de 500 controles realizados a viajeros procedentes del gigante asiático. En total, ahora mismo son algo más de 3.500 los pacientes ingresados y positivos en covid en toda España. A la espera de la decisión que tomen los expertos de la Ponencia de Alertas que asesora al Gobierno, expertos consultados por COPE llaman a la prudencia.

Los expertos que aconsejan al Gobierno sobre las medidas a tomar consideran que es el momento idóneo para eliminarlas. Una decisión que choca con la opinión de algunos epidemiólogos.

Parauno de ellos, Estanislao Nistal resulta algo precipitado, pero no exactamente por el coronavirus. "En estos momentos nos encontramos con una situación en la cual los virus respiratorios van a incrementar en las próximas semanas su incidencia y el uso de mascarillas en lugares muy concurridos puede reducir la posibilidad de la transmisión comunitaria".

Algunos incluso como Daniel López Acuña, exdirector de acción sanitaria situaciones de crisis de la Organización Mundial de la Salud, considera que eliminarla en el metro, autobuses o trenes, está ahora mismo fuera de lugar. "Retirarla en esta temporada es una insensatez y no muestra más que una premura por querer pasar página sin poder hacerlo".

Van más alla. Para estos expertos su utilización en el transporte público sería aconsejable y obligatoria en épocas de frío, cuando la circulación de varios virus coinciden y la propagación es alta. Es algo que se hace en otros países como ha apuntado Nistal. "Cuando tenemos un problema de aumento de casos de virus de transmisión respiratoria, el uso de mascarillas en lugares muy concurridos en lugares donde además no se respeten las distancias de seguridad,ventilación sea muy mala o lugares donde pueda haber personas en riesgo, el uso de mascarillas va a reducir la transmisión y va a reducir también el impacto que pueda tener en la salud de estas personas".

Habrá que esperar a ver lo que pasa esta semana, si bien aunque se elimine su uso obligatorio en el transporte público, va a seguir siendo requerida en los centros sanitarios o las farmacias.

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