El epidemiólogo e investigador Quique Bassat hablaba claro este domingo en La Mañana de Fin de Semana de COPE sobre la última sugerencia de Sanidad de volver al uso de las mascarillas en interiores ante el repunto de contagios por coronavirus antes del verano y de San Fermines. De momento, el uso de las mascarillas sigue sin ser obligatorio, pero la situación podría revertirse en las próximas semanas.

Y es que los datos de la pandemia comienzan a preocupar: desde finales de marzo Sanidad y las CCAA sólo recogen en las estadísticas los casos positivos en los mayores de 60 años. La curva roza los 1.000 casos, 214 puntos más que la semana anterior, y es que hay dos nuevas mutaciones del virus: BA4 y BA5 que son más contagiosas, sortean la carga inmunitaria de las vacunas y ofrecen cuadros más leves que los de Delta u Ómicron.

La diferencia entre AB.4 y AB.5 y Ómicron

“Hay motivo para entender que esta es la nueva normalidad a la que vamos a ir enfrentándonos en los próximos meses, habrá subidas y bajadas, pero no estamos cerca de que se vaya”, explicaba el investigador del Instituto de Salud Global de Barcelona. “Van a seguir habiendo aumentos como el de ahora. Ahora bien, la situación no tiene nada que ver con las olas previas porque, además de estar más protegidos por la vacuna ante la enfermedad grave estamos viendo casos muy leves, a los que a la población general les causa un episodio relativamente benigno”, comenta en COPE Bassat.

Sobre la diferencia entre Ómicron, Delta y las otras variantes previas con las nuevas BA.4 y BA.5, el epidemiólogo aclara que “son mutaciones más infecciosas que las versiones previas pero causan unos cuadros más benignos, y los casos que estamos viendo en los hospitales son personas con patologías coexistente o gente muy anciana o muy mayor”.

“Sortea mejor la protección que nos daba haber pasado la enfermedad previamente, ahora sabemos que, incluso habiéndolo pasado hace unos meses, ahora podemos infectarnos”.

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Mascarillas en interiores otra vez

También se ha querido referir el experto a la sugerencia de Sanidad de volver a utilizar las mascarillas en interiores. Para Bassat, no tiene por qué volver a ser obligatorio: “Una cosa es que ya no sea obligatorio en interior y otra cosa es que sea de sentido común que, en una situación de aumento de la transmisión, busquemos proteger a los más vulnerables”.

“Eso no quiere decir que todos tengamos que volver al uso generalizado de mascarillas en interiores, pero sí que no tenemos que tener miedo de seguir llevándola y ponérnosla en situaciones donde pensemos que nos estemos arriesgando demasiado”, aclara.

Además, el epidemiólogo señala que es “el momento indicado”, para una cuarta dosis, “pero solo a los colectivos más vulnerables”. “Las vacunas actuales ya sabemos por desgracia que no funcionan frente a la infección, pero sí que nos ha dado una protección robusta contra la enfermedad grave. No tenemos mucha otra opción que ofrecer a las personas más vulnerables que esa cuarta dosis a la espera de una nueva generación de vacunas”.