El mundo mira con preocupación estos días a China tras la crisis de Taiwán desatada por la visita a la isla de la número tres de Estados Unidos, Nancy Pelosi. Hasta ayer mismo han durado las maniobras del ejército chino alrededor de Taiwán y parece que la presión militar va a continuar pero más allá del conflicto diplomático, esta crisis ha supuesto un nuevo “infarto” para la economía mundial. Y es que China no es solo es el país más poblado del mundo con 1.400 millones de habitantes, también es el mayor productor y exportador de todo el planeta.

Los datos hablan por sí solos: Uno de cada seis productos intercambiados en el mundo se hace en las fábricas chinas. El pasado año, y a pesar de la pandemia, el comercio exterior chino aumentó más de un 25% y alcanzó los seis billones de dólares. Supera así a las que hasta ahora habían sido las dos potencias exportadoras mundiales: Estados Unidos y Alemania.

El país asiático vende al resto del mundo ordenadores, coches, aluminio, fertilizantes y, por supuesto, juguetes y ropa. Pero curiosamente, las ventas chinas que más aumentaron fueron las de tierras raras que son los elementos esenciales para fabricar dispositivos electrónicos y que se dispararon más de un 77%. China es el segundo importador mundial, el año pasado compró productos por valor de casi tres millones de dólares, sobre todo alimentos, gas, petróleo, carbón o semiconductores.

En 'Herrera en COPE' ha estado Laura González Escallada, fundadora de la plataforma NI HAO CONECTA, plataforma referente en desarrollo de negocios entre España, China e Iberoamérica. NI HAO, actúa como nexo y altavoz de empresarios chinos, españoles e iberoamericanos con el objetivo de ayudar en la internacionalización de los negocios y búsqueda de sinergias empresariales.

Respecto a los intercambios entre ambos países esto es lo que dice Laura: "Lo que más exporta China es cobre, carnicas porcinas, medicamentos y componentes de automoción y lo que más se importa son equipos de telecomunicaciones y sobre todo equipos de procesamiento".

Respecto a los 50 años que cumple la República Popular de China este año: "Las relaciones entre ambos, desde el siglo XVI han sido buenas, España tiene un peso especial ante los ojos de China. Contamos con una representación española en China sin precedentes, en la celebración de los 50 años España va a tener un papel importante".

"En China la clase media está en constante crecimiento, ahora mismo en temas de agroalimentación, como el embutido, es un buen nicho para trabajar porque garantizan casi al 100% el éxito".

Cerca de 14.000 empresas españolas exportan sus productos a China y aunque el país asiático ofrece muchas oportunidades, también es un mercado complicado para hacer negocios. Muchas empresas, fracasan, incluso grandes multinacionales.

Tener un socio o un asesor que conozca bien un país tan grande es la clave del éxito en China. Pero para evitar problemas hay algunos empresarios que directamente se han llevado su empresa al país asiático, Segismundo Noguera es co-fundador de una fábrica de embutidos en Guang-Zhou, al sur de China: "La empresa la fundamos en 2016, estaba prohibido importar productos de embutido y curados en China"

Respecto a la popularidad de su producto y sobre si se consume: "La aceptación es muy buena, con la pandemia se ha complicado todo y ahora solo trabajamos con carne local, utilizando eso sí la receta original y todo el procedimiento. Nuestro producto aquí pertenece a un nicho muy concreto, pese a que el mercado es tan grande, va un poco por el boca a boca, nos conocen por familiares y amigos que lo prueban, pero suele ser a través de la relación con aglún español".