

"La locura de imponer a todo el mundo una electrificación para la que no estamos preparados y que casi se carga la industria del automóvil europea, ¿a quién beneficia?"
El director de 'Herrera en COPE' analiza la actualidad que marca la jornada de este miércoles
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Señoras, señores, me alegro. Buenos días.
No, no, son las 8 de la mañana, son las 7 en Canarias. Qué tarde, ¿verdad? En una mañana de miércoles, 17 de diciembre de 2025, en el que va a seguir lloviendo en muchos puntos de España.
Pongamos orden en la información, la que le dábamos a las 6, a las 7. Hay varias cuestiones. Ahora le contaré esta, que seguramente le interesa mucho a la clase trabajadora, y es que Bruselas ha dicho que a partir del año 2035 sí se podrán seguir fabricando coches con combustible fósil, es decir, gasolina y diésel. Ya saben ustedes, los pijoprogres de Bruselas habían dicho que no, que no, que no, que se acababa, que ya todo eléctrico, eléctrico, o lo que se hayan inventado a partir de 2035, que vaya usted a saber lo que es. Pero bueno, ayer Europa lo que hizo fue dar un mensaje de realismo, de sentido común.
Esta locura de querer imponer a todo el mundo una electrificación para la que no estamos preparados, que casi se ha cargado la industria del automóvil europea, que, bueno, ¿a quién beneficia? A los coches subvencionados chinos. Pues en eso, fíjese, Bruselas no ha hecho ni caso a Pedro Sánchez ni a la chalada, sectaria, inútil que es Teresa Ribera, que vicepreside la Comisión Europea, esta integrista de lo verde que ha quedado como un cero a la izquierda. Felizmente, felizmente, se confirma que Sánchez no pinta nada en Europa. Por mucha portada que le haya dado una revista italiana, ni pinta nada en esto ni en nada.
El otro día se reunieron en Berlín media docena de países europeos para negociar con Estados Unidos una solución para Ucrania. Bueno, allí estaban todos menos el cuarto país de la Unión, que es España.
Pero es que ayer hubo reunión telemática de los ministros de Defensa de la OTAN y España tampoco participó. O sea que, bueno, le vamos a contar.
Pero hoy el debate, como le contábamos esta mañana, le venimos contando desde pronto, eldebate.com publica otra información relevante sobre las andanzas de Rodríguez Zapatero. Hemos visto las imágenes de senderismo por el monte del Pardo con uno de los implicados de la operación Plus Ultra. Bueno, pues hoy lo que cuenta El Debate es que Zapatero y el famoso Julito, Julio Martínez, detenido, se comunicaban a través de teléfonos de prepago y sin internet. O sea, vamos, el famoso Nokia este de hace 30 años.
Esos que solo permitían llamar y enviar mensajes SMS, pero no tienen ni internet ni nada, ni conexión con nada. Nada, nada. Que es el método que utilizan habitualmente delincuentes. Bueno, delincuentes y gente de orden también. Tener un Nokia no significa ser un delincuente, ni mucho menos, pero sí que es verdad que los delincuentes que quieren que la policía no rastree digitalmente sus actividades utilizan ese teléfono.
Si recuerdan, el guardia civil implicado en la trama Koldo era el encargado de facilitar esos teléfonos seguros. Pues así se comunicaban ZP y su amigo Julio Martínez, al estilo gánster. Y la información añade que la operativa incluía la destrucción no solo de la tarjeta SIM, sino del propio aparato.
Según cuenta Vozpópuli, la policía estaría tratando de documentar la vinculación de algunas empresas de Julito Martínez con Rodríguez Zapatero. Y además de esas informaciones contra Zapatero, disparan también los implicados en la trama Koldo. El propio Koldo, en sus declaraciones a El Debate, en fin, habla del patrimonio del expresidente. O el hijo de Ábalos, en Vozpópuli también hoy, habla de todo ello. Y The Objective entiende que la Guardia Civil sospecha que fue la propia Policía, la UDEF, quien explotó de forma controlada este caso para blindar a Rodríguez Zapatero dentro de la operación Plus Ultra, cortarle el paso a la UCO de alguna manera. No está mal visto, pero claro, veremos cómo esto se va sustanciando.
Pero es que, yo le decía antes, también hay novedades en otra trama de corrupción, que es el caso SEPI, una trama que dirigía presuntamente Vicente Fernández, que era presidente de la SEPI, nombrado, mano derecha… ahora no le conoce, pero bueno, entonces sí le conocían: María Jesús Montero, Leire Díez y Antxon Alonso, los Iruñea. Estos también se comunicaban al estilo mafioso con una aplicación especial de mensajería que se llama Threema y, al parecer, es la preferida por los narcotraficantes por su nivel de seguridad.
O sea, tiene gracia porque fíjense: las comisiones de este grupo se cobraban a través de una empresa cuyo nombre no puede ser más celtibérico show: Mediaciones Martínez. Pues Mediaciones Martínez, sin tener un solo empleado, pasó en un año de una facturación de 47.000 a 500.000 euros. Sin empleados. Que aprendan los autónomos de España lo que es fácil, que es ganar dinero. Mediaciones Martínez compartía sede social en un piso de Madrid con otras 50 empresas. ¿Hacienda, esto no le llama, no le mosquea nada, que albergue a 50 empresas pantalla?
El Español cuenta también que algo se debió maliciar María Jesús Montero sobre las actividades de Vicente Fernández, porque la nueva responsable de la SEPI hizo una purga de dirigentes en el holding público y contrató una agencia de detectives para ver qué había pasado. Eso sí, por supuesto, lo que hayan averiguado no ha servido para que denuncien nada.
Y luego, por si fuera poco, las conexiones de toda esta trama con Forestalia, empresa que también fue objeto de registro la semana pasada, apuntan a la connivencia de algún alto cargo de Teresa Ribera en el Ministerio de Transición Ecológica. O sea, ese funcionario que, después del retiro, siguió como asesor de la ministra, era el encargado de dar luz verde a todos los informes de impacto ambiental favorables a las inversiones de Forestalia.
Y en ese ambiente, ayer se conoció el nombre del nuevo responsable de la UCO, que es el coronel Pedro Merino, con un currículum impecable y el respeto de quienes le han tratado.
A todo esto también se le suman nuevos informes de acusaciones sexuales. Ayer se denunció otro caso en un ayuntamiento de Ourense. La izquierda no da abasto, ¿verdad?
En Galicia hay organizada una revuelta contra el líder sanchista Besteiro y en Sumar hay conatos de revuelta también contra Yolanda Díaz, que, por cierto, aquello de donde dije remodelación profunda del gobierno se queda en una reunión con Sánchez, como si no estuvieran reuniéndose a todas horas. La semana pasada tú escuchabas a Yolanda Díaz y parecía que a Sánchez no le iba a llegar la camisa al cuerpo. O cambia el gobierno de forma radical o, si no, nada de nada.
Porque ayer fue el día en el que la abejita Maya se escondió. Mandó comparecer al criptocomunista este de Enrique Santiago para que, en una rueda de prensa, se explicara que la montaña ha parido un ratón. O sea, traducido: nada. Que se marchará Pilar Alegría y ya está. Y a Sumar se le han pasado las ganas de la rebelión.
Teletubbies, teletubbies rosas. Además es que les han venido a decir los socialistas a los de Sumar: daos una vuelta para enfriaros, porque a fin de cuentas sois tan sinvergüenzas como nosotros. Solo estáis en el poder por el poder. Y así es.



