Christopher McCandless es uno de los símbolos más recientes del movimiento anticapitalista.

En verano de 1992, harto de su ritmo de vida de joven de familia adinerada y habiendo cursado sus estudios, decidió despojarse de todas sus pertenencias, donó sus ahorros a gente que los necesitaba y emprendió el viaje más largo de su vida.

Sin apenas víveres, cruzó todo Estados Unidos hasta adentrarse en una peligrosa zona de naturaleza en Alaska.

Se refugió en lo que ya es un símbolo para mucha gente. En el autobús abandonado número 142 de la flota pública Fairbanks más conocido como 'Magic bus'.

Allí, el joven, después de pasar varias semanas sin comida y afectado por ingerir una planta venenosa, acabó desfalleciendo. Murió mientras trataba de regresar a la civilización.

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25 years. There are days when the ache is still so overwhelming. At a loss to put the right words together tonight, a good friend and gifted writer allowed me to share my favorite poem of his. Thank you, JD, for the energy. Amongst mountains And tall trees A man feels solid... He almost Understands About patience And virtue And peace. I wonder - If all men Had the Time To experience this... This placid silence... What kind of world Would it be? The one He imagined... Definitely. ~ J.D. Morris

Una publicación compartida de Carine McCandless (@carinemccandless) el 18 Ago, 2017 a las 9:13 PDT

Su historia fue llevada incluso a la gran pantalla a través de una de las películas de culto más importantes de los últimos años:'Hacia rutas salvajes'.

Su repercusión, ha sido tal, que algunos atrevidos han intentado llegar hasta ese autobús, símbolo de la travesía de McCandels.

Lo que no están teniendo en cuenta decenas de fans de este personaje es de lo poderosa que puede ser la naturaleza. Y es que la última en intentar hacer la travesía ha fallecido en el intento. Y no ha sido la única.

Esta es la 'Historia del día' en 'Herrera en COPE'.